El Departamento de Seguridad Interior del gobierno de Estados Unidos anunció el descubrimiento que hicieron, junto con autoridades de México, de otro narco túnel en Mexicali, Baja California.
“Saludo a los agentes especiales del Buró de Inmigración y Aduanas de Investigaciones Especiales de Seguridad Interior (HSI, por sus siglas en inglés) por descubrir este túnel. Clausurar estos túneles es crítico para detener el tráfico de productos ilícitos a Estados Unidos”, indicó Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Interior en el gabinete del presidente Joe Biden.
El gobierno estadunidense especificó que el pasadizo subterráneo mide 55.7 metros de largo y está ubicado cerca de la frontera internacional.
El túnel se encuentra dentro de una residencia, a un lado de la línea limítrofe entre Baja California Norte y California, a 6.7 metros de profundidad y 1.22 metros de ancho por 91 centímetros de alto.
La entrada mide 3.65 x 3.04 metros y aún no contaba con salida del lado del territorio estadunidense, del que se localiza a 91 centímetros de distancia, pero cuenta con electricidad, sistema de ventilación y transporte de carga con rieles de tren.
Por la estructura, diseño y construcción, el túnel descubierto en Mexicali se asemeja a los pasadizos subterráneos construidos por la fracción del Cártel de Sinaloa bajo la conducción de Joaquín “El Chapo” Guzmán, enjuiciado y sentenciado a cadena perpetua en Estados Unidos.
De hecho, aunque de mayor longitud, Guzmán Loera utilizó un túnel con estructura similar al descubierto en Mexicali, para escapar de la prisión de máxima seguridad de El Altiplano, en Almoloya de Juárez, Estado de México, el 11 de julio de 2015.
“Este tipo de túneles permiten a los traficantes de drogas realizar actividades ilícitas virtualmente sin ser detectadas entre la frontera México-Estados Unidos”, indicó Cardell Morant, agente especial a cargo de la oficina del HSI en San Diego, California.