La exhibición está integrada por piezas unidas por un discurso sobre la preocupación de la identidad y la memoria colectiva, expresó Sofía Mariscal, curadora mexicana.
"Hay muchas exploraciones con respecto a la preocupación de dónde venimos y del legado indígena mexicano, pero también está presente la relación con Estados Unidos y cuestiones sociales que suceden ahora, por lo que estamos hablando de memoria, territorio, olvido y de cómo nos vamos configurando", explicó. Esta inquietud que enlaza a los artistas se manifiesta en esculturas, performances, videos, textiles, entre otros formatos; una diversidad de formas, materiales, sonidos y colores. Se trata de invitación a reflexionar y a analizar los procesos del arte contemporáneo unidos a la geografía, la identidad y la memoria colectiva de México.
Los artistas mexicanos que participan en la muestra son Teresa Margolles, Ximena Labra, Edgardo Aragón, Iñaki Bonillas, Fernando Palma, Fritzia Irízar y Tania Candiani, aunque también hay piezas de creadores de otros países latinoamericanos, como Marilá Dardot (Brasil), Óscar Santillán (Ecuador) y Carlos Arias (Chile), quienes han vivido en México o que su obra y temáticas están vinculadas con el País. "A través de la mirada de los artistas queremos demostrar el México plural y real.
Que no nada más es el del folklore del arte popular, sino también el del tema del narcotráfico o la inmigración, por lo que cada pieza cuenta una historia diferente. "Por eso el nombre de Raíz y rizoma, porque estamos hablando de la profundidad de lo que significa ser México, pero dispuesto como el rizoma, que es este tallo o elemento que va haciendo distintos nódulos y donde una cosa no se tiene que subordinar a la otra", resumió Mariscal.