Mientras los pacientes de COVID-19 ocupan los hospitales de Filipinas casi al límite, las autoridades informaron que casi 100 niños de un orfanato contrajeron la enfermedad.
La alcaldesa de Ciudad Quezon, Joy Belmonte, dijo que el brote en el orfanato se pudo haber evitado, y “se pudo haber salvado a los niños de los riesgos letales del COVID” si se hubieran seguido al pie de la letra los estándares mínimos de salubridad.
De los 122 infectados, 99 son menores de 18 años, mientras que el resto es personal de orfanato Gentlehands, declaró la alcaldesa en un comunicado.
Aparentemente, el virus se propagó cuando un adulto asintomático visitó el orfanato ubicado en el área metropolitana de Manila.
Filipinas reportó el miércoles 12.751 nuevas infecciones y 174 decesos, y ahora cumula 2,1 millones de casos y 34.672 muertes.