Filantropía y activismo son un buen negocio

Claudio X. González se autoasignó un sueldo superior a los 300 mil pesos al mes en MCCI

Ciudad de México

La filantropía y el activismo es también un negocio: es el caso de Claudio X. González Guajardo, quien como presidente de la organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) se autoasignó un sueldo superior a los 300 mil pesos al mes, casi el triple de lo que gana el presidente Andrés Manuel López Obrador.

En efecto, desde que González Guajardo fundó MCCI, en 2016, y hasta su salida de esa organización, en julio de este año, tuvo un ingreso mensual bruto de 171 mil pesos cada quincena, aunque en ocasiones se asignó ingresos más elevados.

Con base en la información que MCCI proporcionó al Servicio de Administración Tributaria (SAT) y que puede ser consultada en la página de donatarias autorizadas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), el presidente de esa asociación civil percibió, en 2016, 3 millones 903 mil pesos, para un promedio de 250 mil pesos al mes.

Sin embargo, al hacer una revisión de los pagos que recibió a lo largo de ese año (17 de 171 mil, uno de 258 mil, otro de 129 mil, uno más de 345 mil y un adicional de 701 mil 937 pesos), el ingreso anual total de González Guajardo en 2016 ascendió a 3 millones 639 mil pesos.

Es decir, el ingreso promedio mensual del jefe de la iniciativa “Sí por México”, que trama una alianza de los partidos PRI, PAN y PRD, fue de 303 mil 250 pesos brutos, casi el triple de lo que percibe el presidente López Obrador.

En 2017, según la escasa información pública de la organización fundada por el hijo de Claudio X. González Laporte, expresidente del Consejo Mexicano de Negocios –donde se agrupan los empresarios más ricos y poderosos de México–, el sueldo del presidente de MCCI fue de 3 millones 54 mil 321 pesos.

En 2018, el ingreso anual de González Guajardo ascendió a 3 millones 83 mil 673 pesos y el año pasado ocurrió algo curioso, conforme a lo que informó MCCI a la SHCP: El ingreso del presidente disminuyó a menos de la mitad, a un millón 374 mil 393 pesos, para un sueldo mensual de 114 mil 532 pesos.

Hasta el próximo año se conocerá la información correspondiente a 2020 cuando, en julio, González Guajardo dejó la presidencia de MCCI a María Amparo Casar Pérez, quien fue la coordinadora de asesores de Santiago Creel en la Secretaría de Gobernación de Vicente Fox y quien, como presidenta ejecutiva, tuvo ingresos superiores a los 250 mil pesos mensuales.

En efecto, según la información que MCCI rindió a la SHCP, Casar Pérez cobró, desde 2016, 264 mil pesos mensuales –132 mil pesos quincenales, según recibos de honorarios–, aunque en marzo de 2016 cobró 548 mil pesos y en diciembre de ese año el recibo fue por 180 mil pesos.

Sin embargo, como en el mismo caso de González Guajardo, estas cifras no son consistentes con las que MCCI presentó en el portal de la SHCP, donde además no identifica a sus donantes.

En efecto, conforme a los recibos de cobro, Casar Pérez tuvo ingresos de 264 mil pesos al mes, pero en la página de la SHCP aparece que el presidente ejecutivo –que era ella– tuvo ingresos por 2 millones 364 mil pesos, para un promedio de 197 mil pesos al mes.

Hay, como se 

aprecia, datos 

que no cuadran

González Guajardo ha fundado otras organizaciones que reciben donativos y que le han gendado ingresos, como Mexicanos Primero, A.C., Aprender Primero, A.C. Unión de Empresarios para la Tecnología en la Educación, Despacho de Investigación y Litigio Estratégico, A.C., y es empresario en Gentera, un banco en el que participa Javier Arrigunaga Gómez del Campo, director del Fobaproa cuando, en 1998, se convirtieron en deuda pública los abusos de empresarios, banqueros y políticos.

A raíz de la publicación del reportaje sobre los mecenas de MCCI, magnates del Consejo Mexicanos de Negocios, llamado “cúpula de cúpulas” del sector privado, el presidente Andrés Manuel López Obrador sugirió una investigación sobre los donativos a ésta y otras organizaciones filantrópicas, porque son deducibles de impuestos.

Al respecto, la jefa del SAT, Raquel Buenrostro, afirmó que existen mucha opacidad y abusos en las organizaciones filantrópicas, que incluyen grandes gastos de administración y altos salarios.