Fustigan decisión porque representa una amenaza al ambiente fronterizo
Exentarán ciertas leyes para construir el muro
Fustigan decisión porque representa una amenaza al ambiente fronterizo
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San Diego, Cal. El gobierno del presidente Donald Trump dispensará la aplicación de revisiones ambientales y otras leyes para reemplazar un tramo del muro fronterizo con México en el área de San Diego, un nuevo paso para cumplir una de sus promesas de campaña. Varios críticos, incluido el Centro para la Diversidad Biológica, fustigaron la decisión por considerar que se extralimita y representa una amenaza al ambiente. El Departamento de Seguridad Nacional indicó en un comunicado el martes que “en los próximos días” publicará en el Federal Register –la gaceta gubernamental– una notificación para exentar al gobierno de la Ley Nacional de Protección Ambiental, la cual requiere efectuar extensas revisiones de impactos ambientales, y varias leyes adicionales en un tramo de frontera de 24 kilómetros (15 millas) desde la costa del Pacífico hacia el este. Será la sexta vez que el departamento ejerce esa autoridad desde 2005 y la primera desde el 2008. Una ley aprobada en 2005 le otorga al Departamento de Seguridad Nacional una extensa autoridad para dispensar “todo requerimiento legal” con el fin de construir barreras fronterizas, después de años de impugnaciones que a la larga resultaron infructuosas ante la corte para impedir que se erigiera un muro fronterizo en San Diego bajo el argumento de que se violaban leyes ambientales. El Congreso aprobó la ley para debilitar esfuerzos similares en otros lados, lo que derivó en cientos de kilómetros de nuevas barreras en la frontera entre Estados Unidos y México durante los últimos años del gobierno del presidente George W. Bush, con lo cual alcanzaron su extensión actual de 1,040 kilómetros (650 millas). La semana pasada, la Cámara de Representantes autorizó la solicitud del gobierno de asignar 1,600 millones de dólares para comenzar la construcción del muro fronterizo ordenado por Trump, el cual incluiría el reemplazo de 22 kilómetros (14 millas) en San Diego que están en la más reciente exención, y la construcción de 96 kilómetros (60 millas) de nuevas barreras en el Valle del Río Grande, en Texas. Se desconoce cuándo emitirá el Departamento de Seguridad Nacional las dispensaciones para Texas, donde en la actualidad se efectúan el mayor número de cruces ilegales. El Centro para la Diversidad Biológica impugnará la exención en San Diego bajo el argumento de que la ley de 2005 no se aplica al reemplazo de barreras, dijo Brian Segee, abogado de ese grupo de defensa del medio ambiente con sede en Tucson, Arizona. El organismo ya interpuso una demanda contra el gobierno con relación al reemplazo de la barrera en San Diego y los planes para la construcción de prototipos en esa ciudad a convocatoria de Trump, quien pidió un “enorme y hermoso muro”. El caso fue presentado ante el juez federal de distrito Gonzalo Curiel, blanco de frecuentes burlas de Trump en torno a las demandas de supuesto fraude contra la ahora extinta Universidad Trump, el cual fue solucionado el año pasado fuera de tribunales poco antes de que se iniciara el litigio. Curiel presidió ese caso.