El gobierno estadounidense anunció que está investigando a cinco estados con gobernadores republicanos que han impedido las órdenes de ponerse las mascarillas en las escuelas por el coronavirus, al considerar que tales políticas podrían ser discriminatorias contra alumnos con discapacidades o condiciones de salud.
La Oficina de Derechos Civiles del Departamento de Educación envió cartas a los jefes de educación en Iowa, Oklahoma, Carolina del Sur, Tennessee y Utah. Esos estados han prohibido que las escuelas requieran a estudiantes y personal el uso de cubrebocas, una medida que, según el departamento, podría evitar que algunos estudiantes asistan al colegio de manera segura.
“Es simplemente inaceptable que los líderes estatales pongan la política por encima de la salud y la educación de los estudiantes a quienes juraron servir”, dijo el secretario de Educación, Miguel Cardona, en un comunicado. “El departamento luchará para proteger el derecho de todos los estudiantes a acceder al aprendizaje en persona de manera segura”.
La investigación representa una fuerte escalada en la batalla de la administración del presidente Joe Biden con los estados republicanos que dicen que usar cubrebocas debería ser una decisión personal. Biden le pidió la semana pasada a Cardona que explorara posibles acciones legales, lo que llevó al departamento a examinar si las políticas podrían equivaler a violaciones de derechos civiles.
Las políticas estatales entran en conflicto con la orientación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, que recomiendan el uso universal de barbijos para estudiantes y maestros en el aula.
Si las investigaciones determinan que las prohibiciones estatales sobre el uso de mascarillas han discriminado a los estudiantes con discapacidades, podría dar lugar a sanciones, incluida la pérdida de fondos federales para la educación.
El departamento dijo que no ha abierto investigaciones en otros estados donde los tribunales han anulado dichas prohibiciones o no se están aplicando, como en Florida, Texas, Arkansas y Arizona. Pero la agencia dijo que está “monitoreando de cerca” a esos estados y está preparada para tomar medidas si es necesario.