Estudiante mexicano tiene 171 inventos diversos: Drones, motores y brazos robóticos
Monterrey.- Con 18 años, el estudiante de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME), José Armando López Martínez, cuenta con un total de 171 inventos diversos como drones, motores de combustión, eléctricos e híbridos, así como un dispositivo de inteligencia artificial.Estudiante del cuarto semestre de la carrera de Ingienero Mécanico Electricista en la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), el joven desarrolló sus primeros inventos cuando cursaba en la preparatoria número 8 de la institución educativa.La UANL indicó que desde hace menos de tres años son 171 inventos los que López Martínez ha registrado, de los cuales 23 tienen un avanzado segundo y tercer nivel de búsqueda ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI), por lo que en cualquier momento le podrían entregar el correspondiente registro.Sus primeros inventos incluyen un dispositivo de pistones controlados térmicamente para reducir el consumo de combustible en los autos.Desde sus estudios de secundaria en el municipio conurbado de Guadalupe, el joven creó una transmisión y un “diferencial autobloqueante” que reduce el gasto de energía en la tracción de los coches de carga.Además, creó un caliper (pistón que sujeta el disco) en el frenado que es más sensible y recupera un 43 por ciento más energía cinética de los habituales 10 o 12 por ciento que se recuperan.“Desde que tengo memoria siempre he sido muy curioso en cuanto a cosas electrónicas y motores. Recuerdo iniciar desarmando, armando y cambiándole los botones a un control de Nintendo 64”, relató.“Pepe”, como es conocido por sus amigos, mostró un dron al que le instaló celdas solares que, dice, le dan una autonomía de vuelo de casi dos horas; lo cual supera a los 15 minutos promedio que vuelan los drones que hay en el mercado.Resaltan entre los inventos del joven “Jarvis”, un dispositivo de I.A. (inteligencia artificial) con el que el inventor charla a menudo cuando llega a su casa y al cual considera un amigo.A Jarvis (personaje que asiste a Stark en la película de Iron Man) Pepe lo programó en el lenguaje Python e incorporó tres bibliotecas de cinco diferentes diccionarios: inglés, alemán, italiano, español y latín, por lo que para controlarlo, tiene una diadema auricular con mando de voz.“Puedo entablar una conversación con ella como si fuera cualquier persona. Desde cualquier punto IP o LAN se puede conectar a internet sin necesidad de un password. No hay necesidad de desencriptar nada”, explicó el inventor.Entre sus nuevos proyectos, el estudiante busca construir un robot de cuerpo completo y perfeccionar la inteligencia artificial, para lo cual se olvidará un poco de los inventos para enfocarse en estudiar más programación.Mencionó que los registros de sus inventos le cuestan alrededor de dos mil 300 pesos, los cuales cubre con algunos trabajos que realiza con sus vecinos y al conducir un Uber.La meta del universitario es trabajar para la industria de vanguardia mundial de coches eléctricos TESLA en Silicon Valley, al sur de la bahía de San Francisco, California, Estados Unidos.El objetivo está muy cerca de alcanzarse, luego de que hace un par de meses, un ingeniero de Tesla México visitó Monterrey y se enteró de los casi 200 inventos de Pepe y lo entrevistó.“Ahora estoy en la fase de selección de Tesla. Ellos buscaban ingenieros mecánicos, de manufactura y automatización. Se sacaron de onda cuando les dije que tenía 171 registros de patente”, dijo.El tutor del niño genio, el subdirector de relaciones internacionales y ex encargado de innovación de la FIME, Moisés Hinojosa Rivera, comentó que la delegación regional del IMPI les ayuda desde hace años con diplomados y cursos de propiedad intelectual.“Siento que no estamos preparados para darle salida a capacidades como las de José Armando. Hay que inventar sobre la marcha porque nos rebasa a todos. Si estuviera en Silicon Valley o en Boston lo perseguirían compañías o inversionistas”, expuso el profesor e investigador de la UANL.