Nva. Cd. Guerrero, Tam.- La prolongada sequía por las escasas precipitaciones en toda la región fronteriza continúa provocando algunos estragos en el sector ganadero, cuyos productores están pasando por serios apuros económicos.
A consecuencia de la imperante sequía que existe en toda la zona ribereña, los ganaderos sobreviven actualmente bajo características de una declaratoria de zona de siniestro, por lo que solo tienen la esperanza de que pudieran llegarse a registrar algunas lluvias, lo que tampoco se avizora para esta semana.
“La última lluvia fue en octubre del 2018, mientras que el año pasado en el mismo mes apenas los serenos matutinos dejaron algo de humedad en el campo de los potreros en la región”, refirió el ganadero Felipe Javier Fernández Martínez, en su calidad de Presidente de la Asociación Ganadera de Laredo a Nva. Cd. Guerrero.
“Actualmente, la sequía afecta a un total de 11 entidades del país, entre ellas Tamaulipas, en donde el Distrito Agrícola 156 presenta un grave déficit de agua, derivado de la prolongada falta de lluvias”, dijo.
FORMATOS EXIGENTES
De igual forma, reveló que los formatos de la Federación son muy exigentes para declarar una zona de siniestro, por eso se desiste de solicitar ese apoyo y se opta mejor por redoblar esfuerzos para sacar adelante el ganado y el campo.
“Los gastos más fuertes son en la compra de suplemento de alimento y el acarreo de agua, luego que el campo dejó de producir zacate para el ganado y las presas aparecen en su mayoría secas”, señaló Fernández Martínez.
Lo malo es que no hay siquiera avisos de lluvia para la región, por lo que seguramente el 2020 continuará siendo una temporada muy difícil para los productores ganaderos de toda la región.