Estados Unidos sería el gran doble perdedor si fracasa la modernización del TLCAN, pues enfrentaría aranceles más altos de México y Canadá, así como un menor acceso preferencial que los países con acuerdos de libre comercio con sus socios norteamericanos.
Estados Unidos sería el gran doble perdedor si fracasa el TLCAN
Estados Unidos sería el gran doble perdedor si fracasa la modernización del TLCAN, pues enfrentaría aranceles más altos de México y Canadá, así como un menor acceso preferencial que los países con acuerdos de libre comercio con sus socios norteamericanos.
Fred Bergsten, el director emérito del Instituto Peterson de Economía Internacional (PIIE) y uno de los principales expertos comerciales del país, indicó que Estados Unidos debe fijar como meta de las negociaciones fortalecer a la economía de México y mejorar la competitividad regional.Si fracasan las negociaciones del TLCAN, entonces Estados Unidos no sólo enfrentaría un aumento en las barreras de México contra Estados Unidos, sino enfrentaría niveles marcadamente más altos de preferencias para otros países en el mercado mexicano de los países con acuerdos con México, señaló.Estados Unidos sufriría una doble derrota, y el hecho de que México ha sido lo suficientemente sabio para forjar estos acuerdos y está haciendo otros acuerdos, se agregaría a la presión, dijo en un foro sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en el Centro Woodrow Wilson.Estados Unidos, México y Canadá tienen previsto iniciar mañana miércoles la primera de siete rondas de negociaciones para la modernización del acuerdo que entró en vigor el 1 de enero de 1994.Bergsten, cuya institución ha realizado alguno de los más extensos estudios del impacto regional del TLCAN, felicitó en ese sentido la decisión de México de convertirse en líder mundial en la búsqueda y consolidación de acuerdos de libre comercio con otros países.México es el líder ahora en apertura de mercados, diversificación de su comercio, construcción de redes de contactos de negocios en el mundo y continúa negociando con otros países, como Corea del Sur, ejemplificó.Bergsten aconsejó a México mantener la presión sobre Estados Unidos firmando más acuerdos de libre comercio, así como trabajar con Canadá y Japón para revivir el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP), que fue abandonado por la administración del Presidente Donald Trump.Con el TPP de 11, con la Alianza del Pacífico, con esos acuerdos de libre comercio, inevitablemente tendrá un efecto importante en la mentalidad de Estados Unidos, ojalá en la Casa Blanca, ciertamente en el sector privado y laboral de lo que pasaría si no reforzamos los acuerdos que tenemos, mencionó.Estados Unidos anunció que su meta en las negociaciones del TLCAN es eliminar los déficits comerciales con México y Canadá, eliminar el Capítulo 19 de Resolución de Controversias e incorporar temas no incluidos en el acuerdo original, como manipulación de divisas y corrupción.Bergsten lamentó que la administración Trump vea a México y Canadá como adversarios y sostuvo que el mejor desenlace del TLCAN es una negociación tradicional que resulte en el fortalecimiento de las tres economías y en una mayor competitividad.Si la administración Trump quiere de verdad fortalecer el balance comercial de Estados Unidos con México, sólo hay una manera obvia de hacerlo: reforzando la economía mexicana, apuntó.Si México crece más, importará más, si México tiene un peso fuerte, Estados Unidos será más competitivo en los precios, esa es la manera de obtener los objetivos, no jugando con reglas de origen y mecanismos de resolución de disputas y otros minucias, puntualizó.