Bengalíes y Carneros rompen el ayuno de 29 años y serán los protagonistas del Super Bowl LVI en el SoFi Stadium, que se une a la lista de grandes recintos angelinos que han visto coronarse a grandes franquicias. Y es que en la ciudad californiana se realizó el primer el Super Bowl, mismo que se jugó el 15 de enero de 1967 entre los Empacadores de Green Bay de Vince Lombardi y los Jefes de Kansas City en el Memorial Coliseum de Los Ángeles.
En el mismo recinto, el cual recibió los Juegos Olímpicos en 1984, se celebraría otro Súper Tazón, y después se montaron cinco Súper Domingos más en el Rose Bowl de Pasadena, hasta que ahora la acción vuelve a esa zona, pero ahora en el moderno recinto de Inglewood, California. El duelo entre Cincinnati y Los Ángeles será el octavo en el Condado de Los Ángeles, y la historia ha demostrado que en los duelos en esa parte de California se ven a equipos que hicieron historia. Los Packers que fueron el primer campeonato, así como los Delfines de Miami que se coronaron invictos en el Super Bowl VII celebrado en 1973, o ya en Pasadena se coronaron equipos como la dinastía de los Acereros de Pittsburgh -sumaban su cuarto título-, así como el título del legendario coach John Madden con los Raiders -en ese entonces en Oakland-, hasta el primer título de dos en los 90 de los Vaqueros de Dallas.
Esta edición, la 27 y última visita del SB que se había dado a la zona angelina, se realizó el 31 de enero de 1993, cuando los Cowboys masacraron 52-7 a los Bills de Búfalo.