Las empresas de circo que continúan varadas en esta frontera, esperan que en el próximo decreto estatal con respecto a la contingencia del Covid-19 se les autorice retomar operaciones, tal y como ocurrió apenas el 14 de septiembre con los cines, espacios deportivos y culturales, al argumentar que se trata de más de 100 familias pertenecientes a por lo menos 3 empresas.
Desde finales de marzo los trabajadores de este rubro tuvieron que improvisar nuevas formas de obtener recursos, realizando shows en cruceros o vendiendo alimentos en las calles, lo que provocó la solidaridad de la población quienes han acudido a llevarles despensa.