- CIUDAD DE MÉXICO
El percance de la venezolana también estuvo relacionado con el desgaste natural de sus articulaciones, común en violinistas y tenistas debido al movimiento repetitivo. La famosa confesó en una revista de circulación nacional entonces, que temía perder la movilidad y no volver a pararse en un escenario.
A pesar de las esperanzadoras noticias del médico, quien le aseguró que en unas semanas podría volver a tocar, la artista estaba abrumada por el miedo al futuro y, en un momento de desesperación, incluso consideró quitarse la vida.
En una entrevista reciente con "De Primera Mano", Montoya compartió que ese momento fue una de las peores experiencias de su vida: "Me da pena decirlo porque estoy muy agradecida con la vida, con Dios, pero era tanta mi desesperación que sentí que ya no quería vivir".
Agregó que fue muy duro, ya que se sentía inútil y le costaba expresar sus emociones. "No te atreves a decirle a la gente lo que estás pensando, lo que se está creando en tu mente. Te puede llegar a envolver y hacerse más grande que tú. Por ahí iba yo y por ahí fueron muchos compañeros que se quitaron la vida", continuó.
Sin embargo, la imagen de sus hijas y el embarazo de una de ellas la detuvieron de cometer dicho acto. "Si a mí me pasaba algo en ese momento... quien lo podía sufrir era ella que estaba comenzando su etapa para convertirse en madre", externó.
Ahora, la artista se encuentra contenta dando espectáculos principalmente en Estados Unidos, con un 90% de movilidad en su hombro. Además, espera regresar a México a finales de año para continuar con sus presentaciones.
El tremendo susto de Montoya tras la cirugíaDespués de la cirugía, Montoya expresó que vivió un gran susto al darse cuenta de que su brazo no reaccionaba. "Se me empezó a producir un estrés horrible porque parecía que tenía el brazo de un cadáver a un lado, una experiencia terrible, lo veía como de una persona muerta, estaba impresionada", compartió con TV Notas.