Hacen estafas en su nombre

Thayanne será homenajeado el mes entrante con el premio lcono durante la ceremonia de los Premios Billboard de la Música Latina. El cantante puertorriqueño además actuará en la gala del 29 de septiembre en Coral Gables, Florida.

Tres de los directores más destacados del País, Guillermo del Toro, Alfonso Cuarón, Amat Escalante, y el actor y productor Diego Luna, que también tiene algunos trabajos de dirección en su haber, han sido los últimos objetivos de un estafador que envía misivas en sus nombres a escritores relativamente desconocidos, prometiéndoles contratos cinematográficos a cambio de los derechos de sus libros o guiones, informó Variety.

Las estafas, de acuerdo con Escalante, empezaron al menos hace dos años y, según el blog Writer Beware, que ha detallado el alcance de éstas y muestra capturas de pantalla de las cartas; Diego Luna fue el último en ser blanco el 11 de enero.

En agosto de 2022, Cuarón tuiteó una advertencia a sus seguidores diciendo:

Escalante dijo que su abogado incluso envió un correo electrónico de cese y desistimiento, pero la respuesta fue: “Llámame y dejaré de hacerlo. Ya sabes mi número”.

Ilene Feldman, la representante de Escalante en Los Ángeles, dijo que no llamaron al impostor porque no querían entablar relación con él.

Aún no saben cómo o si se ha beneficiado de estas estafas.

“Están jugando con el tiempo, el dinero y los sueños de la gente; sólo quiero que esto se acabe”, aseveró Escalante. “Puede que el 99 por ciento sepa que es una estafa, pero siempre queda ese 1 por ciento que puede que no”.

Del Toro, nominado a Mejor Película Animada por Pinocho, no quiso hacer comentarios, pero tuiteó el 27 de enero.

“Por favor, no caigan en estafas que anuncian reuniones, clases, conferencias de material de personas que pretenden ser, o representarme, a mí o a cualquier director, a menos que provengan de sus canales oficiales, -como éste- y puedan verificarlos”.

La plantilla de estas cartas, con algunas variaciones, es la misma.

La oficina de Feldman fue contactada por al menos diez escritores que habían recibido correos electrónicos del mismo impostor. En su carta a las posibles víctimas, utilizaba varias cuentas de Gmail, seguidas de hasta tres números de teléfono, incluido uno en el Reino Unido.