Ciudad de México
En las últimas horas ha circulado un video, a través de las redes sociales, donde se puede ver a la actriz Ana Brenda Contreras en un evento para promocionar su más reciente película “Reviviendo la Navidad”, al lado de Mauricio Ochmann; sin embargo, lo que llamó la atención de los usuarios fue la actitud que la protagonista de “Lo imperdonable” tuvo con uno de sus fans.
NO LE HACE CASOEn la grabación aparece un joven que lanza piropos a la actriz con la intención de que ésta lo note y se acerque a él a saludarlo; pero lejos del comportamiento esperado, la actriz apenas voltea a ver a la cámara y no sólo decide seguirse de lado sin hacer caso, también ignora a otros chicos que se encontraban a su paso.
Como era de esperarse, el clip ya ha generado varias reacciones y críticas hacia Contreras, señalándola de prepotente y creída: “Pensé que era diferente”, “Quema mucho el sol”, “Sólo en sus redes sociales es amable”, “No le costaba nada dar una sonrisa”, “Qué higadito y sangrona”, “Me caía bien, cancelada”, son sólo algunos de los comentarios que se pueden leer.
ACLARA LA SITUACIÓNTras salir a la luz este video, la actriz hizo uso de su perfil en TikTok para aclarar lo sucedido y aseguró que las imágenes fueron sacadas de contexto. Ana Brenda aclaró que la persona que filtró el video estuvo presente en una convivencia con sus fans y que se tomaron varias fotos juntos, las cuales ignora por qué no hizo públicas.
“Esta persona que ustedes ven aquí ya se había formado, ya nos habíamos tomado la foto varias veces y en repetidas ocasiones había estado gritando cosas chistosas, todas las ocasiones me reí con él. Lo saludé, tomó video en cada una de las veces, videos que no subió”, dijo.
Asimismo, destacó que no pudo tomarse tiempo de saludar a todos porque tenía que tomar un vuelo y que si en el clip en cuestión aparece haciendo caras, pero porque el chico estaba empujando a una señora con su bebé.
REPRUEBA ATAQUESPor último, reprobó los ataques que ha recibido a raíz de estas imágenes y fue tajante al expresar que aunque no pueda cambiar la opinión de muchos, nadie tiene derecho de hablar mal de otra persona, como lo están haciendo con ella.