- Monterrey, N.L.
Si hay una actriz que ha seducido al tiempo y se adapta para seguir activa en lo que más le apasiona, que es trabajar en el arte dramático, es Ofelia Medina.
Una mujer que dice: "Yo voy del escenario a la montaña", porque le gusta seguir también activa en su lucha por ayudar a la niñez indígena de México.
Detrás de la sólida carrera de la ganadora del Ariel de Oro hay historias que han impactado en la pantalla chica, en la grande, en teatro y ahora en series.
"Y estoy trabajando en otras dos series, las dos son muy buenas, muy interesantes. Una está por empezar y otra está por terminar (de grabarse)".
La actriz de 73 años, con 55 de trayectoria, se mantiene más vigente que nunca gracias a las plataformas digitales en las que se le ve activa a través de diferentes proyectos que el público puede ver desde su hogar.
En este momento, la también guionista, productora y directora participa como actriz en Tríada, de Netflix, junto a Maite Perroni, David Chocarro, Flavio Medina y Ana Layevska, entre otros artistas.
Y en Senda Prohibida, recién estrenada en la plataforma ViX, con Ela Velden, Raúl Méndez, Miguel Revelo, Iliana Fox y Plutarco Haza.
La primera actriz señaló que las series representan una importante fuente de trabajo para el gremio.
Bajo la dirección de Gustavo Ron y producida por Giselle González, Senda Prohibida se estrenó a finales de junio con siete episodios en su primera entrega.
Medina, quien en 1969 obtuvo su primer protagónico en el cine con Patsy, Mi Amor, de Manuel Michel, indicó además que pronto llegará también en una plataforma su documental La Llevada... Y la Traída, que refleja el ritual detrás de la Virgen de Zapopan, en Jalisco.
A LOS ALTOS DE CHIAPAS"En eso estamos, y bueno, yo continúo mi trabajo por la niñez indígena. Estamos en Los Altos de Chiapas", señaló la activista social, comprometida con la defensa de los derechos de los grupos étnicos marginados.
Ofelia y su equipo usan las redes sociales como TikTok, Instagram y Facebook para informar las actividades que tienen con el Fideicomiso para la Salud de los Niños Indígenas de México.
Por eso, la actriz aseguró que su vida transcurre del escenario a la montaña.