- Ciudad de México
La actriz Ashley M. declaró ante el Tribunal Superior de Los Ángeles que Harvey Weinstein la agredió sexualmente en 2003 durante las grabaciones de Dirty Dancing, como parte del juicio que enfrenta el exproductor desde el 10 de octubre en Los Ángeles.
Cuando los sucesos ocurrieron, Ashley M. tenía 22 años y era parte del elenco de ‘Dirty Dancing: Havana Nights’ como baílarina, producción llevada a cabo por Miramax, excompañía de Harvey.
EN PRIVADOEn sus declaraciones, Ashley dijo que todo comenzó cuando Weinstein se le acerco antes de filmar una escena y la aparto de los demás baílarines para tener una conversación privada.
“Dijo que solo sería un masaje desnudo y que no nos preocupáramos” contó la baílarina entre lagrímas. “Él dijo: ‘Mira a Gwyneth Paltrow y lo que hice por su carrera’”.
Testificó que ella lo rechazó en varias ocasiones, entonces, él pidió un descanso para la cena, lo que la hizo sentir aliviada porque pensó que así podría evitarlo más, pero cuando regreso del descanso, Weinstein la estaba esparando junto a su asistente Bonnie Hung y le ordenó que subiera a su limusina.
“Le dí una mirada ( al asistente) como, ‘¿Puedes ayudarme?’ con mis ojos, me miró y me dijo: ‘No te preocupes. Estaré contigo todo el tiempo. Solo quiere hablar de proyectos’”.
Ashley decidió ir con ellos ya que confiaba en Bonnie Hung y se sentía segura con él según sus declaraciones; después de 15 minutos de camino en la limusina, se dio cuenta de que llegaron a un hotel y se dirigían a una habitación privada.
Entre llanto, Ashley M. siguió su declaración diciendo que Weinstein la metió a la habitación y se puso agresivo, comenzó a quitarle la ropa y la empujó sobre la cama.
“Estaba realmente agradecida de que no me violaran, recuerdo haber pensado, y recuerdo haberme limpiado, vestirme muy rápido y salir muy rápido”, continuó Ashley luego de contar que Weinstein la tocó y se masturbó sobre su cuerpo.