CIUDAD DE MÉXICO.-A lo largo de su carrera, el pianista chino Lang Lang (Shenyang, 1981) no pocas veces ha recurrido al crossover, con Metallica o Billy Joel, por nombrar sólo dos casos, y ahora lo hace con canciones populares de las películas animadas de Disney.
Se rodeó de arreglistas de primera línea para su álbum más reciente, The Disney Book (Deutsche Grammophon), en ocasión de los 100 años de la compañía.
"Soy un gran fan de Disney y siempre quise hacer un proyecto como éste, hacer las grandes melodías de Disney en arreglos para piano que pueden ser (al estilo) del periodo romántico, como Chopin, o al impresionismo francés, como Satie o Ravel, y del gran romanticismo de europeos del Este, como Rachmaninoff, o acercarse a Schumann y Mendelssohn. Algo muy melódico y emotivo", explica en entrevista desde China.
Sir Stephen Hough, pianista y compositor británico, se encargó de "Feed the Birds", de Mary Poppins, y "The Bare Necessities", de El Libro de la Selva, logrando, por ejemplo, un estilo más jazzístico.
"Teníamos que lograr que las armonías funcionaran y que no sólo sonaran como una linda música de fondo, sino que tuvieran sustancia y técnica de manera que funcionaran. Básicamente hubo que reescribir las piezas", recalca.
Del álbum hay dos versiones, una con 14 piezas y otra con 28, donde Lang Lang grabó con la Royal Philharmonic Orchestra y con cantantes invitados, entre ellos Andrea Bocelli, y contiene melodías de las películas Encanto, Blancanieves, Mulan, Pinocho, Frozen, La Bella y la Bestia y Coco, entre otras.
Una selección que recupera los clásicos de Disney sin dejar de lado las películas más recientes, como Soul, en la que contó con Jon Batiste, quien le puso jazz a esa producción.
Aquel niño prodigioLang Lang, el niño prodigio que toca el piano desde los 3 años, cruzó ya la barrera de los 40 y mantiene su estatus de estrella con una agenda plagada de compromisos en 2023-24 en las principales salas de conciertos en Europa y Estados Unidos, como el Carnegie Hall de Nueva York, el Musikverein de Viena, el Concertgebouw de Amsterdam o la Elbphilharmonie de Hamburgo.
"(Con la edad) diría que he ganado madurez como músico. Creo que los 40 es una buena edad para cualquier músico clásico, todavía eres joven, pero no tanto, así que tienes que estar preparado para un entendimiento más profundo de la música, de la vida".
En febrero de 2021 celebró el nacimiento de su primer hijo, fruto de su relación con la pianista coreana-alemana Gina Alice Redlinger, con quien está casado desde 2019, y quien, por cierto, también colabora en The Disney Book.
Cinco meses antes de volverse padre publicó Golden Variations Extended Edition (Deutsche Grammophon), en cuatro Cd's, que llevó al pianista a escalar un Everest musical en su carrera.
"Nunca antes había grabado música barroca y fue muy significativo tocar junto a la tumba de Bach en la Iglesia de Santo Tomás (en Leipzig, en marzo de 2020). Fue una experiencia realmente transformadora. Ahora toco mucho más música barroca".
Una grabación que despertó el rechazo de una parte de la crítica, que juzgó su interpretación de Bach como un sacrilegio, mientras que otra alabó su originalidad.
"En mi opinión, tuve un enfoque bastante original, ya que trabajé con este maravilloso músico, Andreas Staier, quien es un gran clavecinista y estudioso del barroco. Eso me dio la confianza para grabar; si no me hubiera sentido así, ni siquiera hubiera tocado la partitura".
Lang Lang cree que los músicos clásicos son muy afortunados por poder hacer muchas cosas a lo largo de su vida, a diferencia de los deportistas de alto rendimiento que a una cierta edad deben retirarse.
"Cada año intento experimentar diferentes estilos, como este año que estoy haciendo el repertorio francés, y para recital estoy haciendo las mazurcas de Chopin.
"Con 70 u 80 años, gente como Martha Argerich o Daniel Barenboim siguen tocando a un alto nivel y muy frecuentemente, así que si lo comparas con los 40, no es nada", señala.
"Sin embargo, para un tenista profesional, a los 40 -no importa lo grande que hayas sido- debes retirarte. Para nosotros (como músicos clásicos) es una etapa nueva de la carrera".
Con esos parámetros, Lang Lang no está ni siquiera a la mitad de su carrera, que empezó en realidad cuando tenía 21 años.
"Así que podría tocar, digamos, otros 40 años, como Argerich, ¿no?", en referencia a la pianista argentina de 82 años.
Lang Lang comenzó The Disney Book con el Covid y terminó tres años después, cuando el mundo volvió a abrirse; lo presentará en el Auditorio Nacional el 3 de octubre a las 20:30 horas, acompañado de la Orquesta Sinfónica de Minería.