Nueva York, EU
El próximo libro de Louise Glück fue tan inesperado para ella como probablemente lo sea para los lectores de la ganadora del premio Nobel.
Después de más de 10 colecciones de poesía y dos libros de ensayos, incluidos los galardonados “The Wild Iris” (“El iris silvestre”) y “Faithful and Virtuous Night” (“Noche fiel y virtuosa”), la escritora de 79 años completó su primera narración en prosa, que se publicará en octubre. “Marigold and Rose: A Fiction” tiene 64 páginas y se desarrolla como una fábula mientras Glück imagina los pensamientos de dos bebés mellizas.
YA HABÍA ESCRITO PARA NIÑOS
Ya había escrito antes sobre niños, notablemente en su aclamada colección de 1990 “Ararat”. Pero si bien sus poemas se inspiraron en parte en su infancia y sus experiencias como madre, “Marigold and Rose” surgió de una manera muy contemporánea: a partir de videos de sus nietas Emmy y Lizzy que su hijo le enviaba desde California al no poder ir a visitarlas debido a la pandemia.
“Recuerdo haberle dicho a alguien que ver gemelos era como ir al zoológico; ves un comportamiento que normalmente no ves en los bebés, porque estos niños se relacionan entre ellos antes de relacionarse con casi cualquier otra persona”, dijo Glück, que vive en Cambridge, Massachusetts, en una entrevista telefónica reciente.
Ver los videos, dijo, “se volvió para mí una obsesión”.
Los sonidos y las imágenes de Emmy y Lizzy se fueron convirtiendo en palabras. Glück compuso un breve capítulo y se lo envió por email a su hijo, quien le dijo que le gustó tanto que se lo estaba leyendo en voz alta a la familia, aun cuando las bebés eran demasiado pequeñas para entenderlo. Continuó escribiendo capítulos y enviándolos, y en cuestión de semanas terminó “Marigold and Rose”.
“Marigold and Rose: A Fiction” llega en otoño.
FUE UN PLACER
“Escribirlo fue sencillamente un placer”, dijo Glück, quien se preguntó si la velocidad del proceso podría “desconcertar y confundir” a algunos lectores. “A la gente no le gusta escuchar eso porque sugiere superficialidad. Pero en mi experiencia, algunas de mis mejores obras vienen con mucha fluidez. No lo veo como algo malo. Por lo general, significa que estás montado en la ola”.
Desde las primeras líneas — “Marigold estaba absorta en su libro; había llegado tan lejos como la V. A Rose no le interesaban los libros” — Glück une y contrasta las vidas de la introspectiva Marigold y la sociable Rose. Marigold ya está formando una historia en su cabeza, mientras observa la “tranquila confianza en sí misma” de su gemela y razona que “juntas lo tenían todo”.
En capítulos con títulos como “Compartiendo conejitos” y “Rose y el elefante”, Marigold y Rose pasan un día de verano cuidando el jardín de su madre, Marigold inventa un título para su libro planeado (“La infancia de la madre”), Rose comienza a hablar y los padres consideran comprar una casa. Glück incluso coloca una versión de sí misma en la historia, como “otra abuela” a la que “no le interesan las cosas que interesan a los bebés”.
Glück, ganadora del Nobel de Literatura en 2020, explicó en su discurso del premio que se sentía atraída a poemas que hacían de los lectores u oyentes “receptores de una confianza o una protesta, a veces como coconspiradores”.
POEMA MEDIATIVO
En “Marigold and Rose”, la escritora se otorga a sí misma y a sus admiradores el conocimiento que anhela el narrador de “Child Crying Out”, un poema meditativo de su colección “Ararat” sobre la distancia entre las personas, con el lamento de una madre por el silencio del alma de su hijo, la sensación de que está “lejos” incluso cuando lo sostiene en sus brazos.
“Hay mucha más angustia en ese poema porque quien habla es la madre y el niño es inalcanzable de cierta manera”, dijo Glück.
“Recuerdo haber leído al Dr. Spock (médico pediatra y autor) en ese momento (cuando su hijo era un bebé), sobre cómo una madre siempre sabe el significado del llanto de un niño y pensar: ‘Genial, ya reprobé’. Estaba luchando. No tenía ni idea. No podía resolverlo y me sentía impotente, abatida y confundida. Se hizo más fácil, pero solo cuando empezaron a hablar”.
Glück nunca ha publicado una novela o una colección de cuentos y dice que antes de “Marigold and Rose” no tenía deseos de escribir ficción narrativa. Recuerda que intentó escribir un cuento corto al final de su adolescencia y que el resultado le pareció poco inspirador, “estéril”, “simplemente terrible”. Décadas de escribir cartas y ensayos sirvieron para “engrasar” el mecanismo de la prosa extensa, dijo, pero aún no esperaba completar un trabajo como este.
“Hubiera dicho que las posibilidades de escribir un libro en prosa eran cero”, señaló. “Ninguna posibilidad en la vida”.
SORPRENDE
El editor de Glück en Farrar, Straus & Giroux, Jonathan Galassi, dijo que el nuevo libro fue una “sorpresa total”, pero también citó lo que él llama “el humor de Glück por excelencia”: el toque irónico de que Marigold sea escritora antes de saber leer. Su amiga y coautora Kathryn Davis, a quien Glück envía los primeros borradores de su trabajo, dijo que no estaba sorprendida.