Eric del Castillo un rebelde con mucha fe

El primer actor tuvo una infancia feliz en la que le inculcaron valores que transmitió a sus hijas

“Me parece mágico que un niño campesino, golpeado, amarrado a un árbol, con un padrastro, cuya madre se las vio duras porque era maestra rural, sea un papá tan bueno, tan amoroso. Normalmente tendemos a repetir la historia y hasta superarla, pero en su caso ha sido demasiado bueno”, dice Verónica sobre Eric del Castillo, su padre.

La periodista no duda en describirlo como alguien tierno, positivo, protector y amoroso, con gran disciplina y respeto por el trabajo. Alguien capaz de dejarle buenas memorias.

“Recuerdo que un día nos fuimos solos él y yo a la playa. Me visualizo de cinco años. Ahí conocí por primera vez los cangrejos. Es un recuerdo feliz”, comparte.

DE MANTELES LARGOS

Ayer el primer actor cumplió 85 años y lo hace con excelente salud. Acaba de visitar a Kate en Estados Unidos y los fines de semana se convierte en Dios para la obra “Terapia Divina”.

Hablando de Dios, él es muy creyente en la vida real. Fue seminarista de joven, pero afortunadamente para ella, para Kate y para los escenarios, lo dejó. En 2016 cumplieron uno de sus más grandes sueños.

“Dijo que no quería morir sin ir a Tierra Santa” y fueron.

MÁS FUERTE QUE NUNCA

Tras padecer cáncer de próstata, ser operado de la espalda y sanar, su hija lo ve como un roble. “Él está cerca de Dios. Le da la fortaleza”, dice.

Además, dice, su papá nunca tuvo miedo de ir contra la autoridad y eso es algo que les heredó.

“Fue un niño rebelde. Se escapó de la casa. Como escribió en su libro ‘Por qué me hice actor’, cualquiera diría que lo interesante en su vida comienza cuando se hizo actor, pero yo digo que es de ese momento para atrás”, considera.

Ayer la periodista presentó en el programa “Hoy” una primera colaboración con “En el Castillo de Verónica”, que serán cápsulas quincenales que inician con la entrevista a su padre.

Eric también es un eterno enamorado de su esposa, Kate Trillo. “Son un complemento perfecto”, asegura su hija.


HIJA EJEMPLAR. Verónica del Castillo admira a su padre, pues supo educar a su hermana Kate y a ella con sus propios valores.