En un comunicado publicado en línea, el ministro de Exteriores afgano, Amir Khan Muttaqi, aseguró que el congelamiento de los activos está perjudicando a la población afgana, desde el sector educativo hasta el de salud y otras áreas. Sus comentarios surgen un día después de que el Programa Mundial de Alimentos advirtió que millones de personas están sufriendo pobreza en Afganistán.
“Las sanciones estadounidenses han causado caos, no sólo en los viajes y en los negocios, sino también en la asistencia humanitaria”, expresó el ministro afgano a los legisladores en Washington.
El Programa Mundial de Alimentos advirtió el martes que, de los 40 millones de habitantes de Afganistán, unos 8,7 millones están en riesgo de sufrir “condiciones de hambruna”. Otros 14,1 millones están sufriendo inseguridad alimenticia aguda, añadió.
Según el reporte de la organización, la sequía en el país y la situación de 60.000 personas desplazadas son parte de la crisis.
El país también está sufriendo ataques, en su mayoría contra civiles, tras la toma del poder por parte del Talibán en agosto.
Por otro lado, una explosión dañó el miércoles una camioneta tipo minivan en un vecindario chií del oeste de Kabul, matando por lo menos a una persona e hiriendo a otras tres, informó un funcionario talibán.
Zabihula Mujahid, viceministro de Cultura e Información del Talibán, dijo a The Associated Press que se abrió una investigación sobre el incidente. No dio detalles. Nadie se ha atribuido la explosión.
El grupo Estado Islámico se atribuyó una explosión ocurrida el sábado que mató a una persona y dejó heridas a cinco. Una bomba caminera estalló al paso de un taxi el lunes, hiriendo a dos personas.