A casi siete años de la noche fatídica para la máscara de su hermano (Último Guerrero) a manos de Atlantis, el joven que en aquel momento daba sus primeros pasos en el cuadrilátero, no olvida la afrenta sufrida a su apellido, así que aguarda cualquier oportunidad para recordarle al verdugo de su fraterno, que buscará revancha con él o con su heredero.
Este domingo, como parte de la celebración por los 38 años de Atlantis en los encordados, los Guerrero se medirán en la Arena México al festejado y a Atlantis Jr., un reto que saborea el rudo enmascarado.
"Si hablamos de Atlantis, estamos nombrando a alguien que ha hecho una gran historia en la lucha libre mexicana, así que tener la oportunidad de enfrentarlo es muy importante. Queremos salir con victoria, no nos importa si está de festejo, hay cosas que no se olvidan y cuentas pendientes, él viene empujando a su hijo, Atlantis Jr. y se verá arriba del ring de qué estamos hechos", advierte el lagunero.
Más allá de la rivalidad, el joven esteta se da tiempo para reconocer la longevidad que presume su enemigo, y alerta sobre el deseo de emular su vigencia como gladiador. "Quiero luchar hasta donde el cuerpo aguante, pero sé que el cuerpo cobra facturas, vienen lesiones y todo lo que hay detrás de esto. Pero es lo que amamos y sabemos que compañeros han incluso perdido la vida arriba del ring. Ahora queremos seguir disfrutando, llenarnos de esa magia y si puedo llegar a un etapa como Atlantis será bueno".
Mientras tanto, su energía está enfocada en que el presente del enviado de la Atlántida no sea placentero sobre el enlonado.
"Estaba esperando qué domingo íbamos a presentarnos, antes nos enfrentamos en la Copa Dinastías, pero ahora es una lucha a tres caídas y voy a gozar mucho esta lucha. Hay que dar lo mejor y arruinar ese gran festejo de Atlantis. La llevamos difícil pero no nos rajamos y es lo que vamos a hacer, siempre estamos en constante preparación y tenemos que sacar provecho de nuestra fortaleza para ganar".
Algo que tiene claro el Gran Guerrero, es que su mente no puede quedarse en acabar con el experimentado luchador que defiende la esquina del bien, ya que contra su vástago, Atlantis Jr., hay más camino por recorrer. "De aquí en adelante podrían pasar muchas cosas, será un parteaguas para que me suelten más a Atlantis Jr.
Sin su papá en la esquina ni mi hermano en la mía, en mano a mano, para saber qué escuela es mejor sobre el cuadrilátero, si la lagunera o la tapatía".?De cara a la cita de este domingo, llega confiado pero consciente de que luchar al lado de su hermano siempre implica mayor presión. "Sé muy bien cómo es él arriba del ring. Comprometido y exigente, llevarlo en tu esquina requiere estar bien atento, porque arriba del ring él puede cambiar todo y hay que tener una agilidad mental para acoplarse a lo que está exigiendo. Ahora que vamos contra unos rivales con los que hay una historia detrás va a ser aún más exigencia".