En un breve viaje al pasado fue en 1954 cuando Ernesto Lucio, con apenas 17 años, tuvo su primer encuentro con aquel entonces un pequeño ‘Pepe’ Robinson de 11 años, en una alberca de McAllen
EL DESCUBRIDOR DE ‘PEPE’ ROBINSON
En un breve viaje al pasado fue en 1954 cuando Ernesto Lucio, con apenas 17 años, tuvo su primer encuentro con aquel entonces un pequeño ‘Pepe’ Robinson de 11 años, en una alberca de McAllen
Yo soy una persona que defiendo mucho la justicia, no se por qué se oponen de ponerle el nombre de Pepe Robinson a la única alberca que ha existido en Reynosa, después del Casino Petrolero, pero aún todavía más moderna que la del casino porque tiene techo y agua caliente, en Reynosa soñábamos con tener una alberca así, cómo es posible que no le pongan su nombre, que si él estuviera ahorita ahí ya estaría echándose clavados o nadando porque no tiene trampolín. , Ernesto Lucio Arias, / exentrenador de clavados.
Cuando Ernesto Lucio Arias, se decidió a convertirse en entrenador de natación nunca se imaginó que sería el descubridor de la máxima joya deportiva en la historia de Reynosa, el clavadista José de Jesús Robinson González (Q.E.P.D). Sentado en la sala de su casa el señor Ernesto Lucio, tiene un brillo especial en su mirada, mueve constantemente sus brazos al momento de platicar y su alegría es notable y pues como no va estar feliz si está recordando a su gran alumno Pepe Robinson, al cual lo quiso como si fuera su propio hijo.Los recuerdos los tiene muy frescos al señalar detalladamente las diversas vivencias que tuvieron dentro y fuera de la fosa de clavados, cosas buenas y malas pasaron juntos, pero sin duda los triunfos que cosecharon fue la plataforma que llevó a Robinson González convertirse en la más grande estrella deportiva de esta ciudad. Realmente yo me siento muy orgulloso, satisfecho y sobre todo el recuerdo de Pepe me llena de recuerdos muy hermosos, anécdotas y cosas que pasamos juntos como las competencias en que participaba y en donde él siempre ganaba, comentó gustoso. Sin duda alguna, Ernesto Lucio también se une a las voces que piden que el nombre de la Alberca Olímpica de la Unidad Deportiva Solidaridad lleve el de José de Jesús Robinson González, ya que cuenta con un exitoso currículum deportivo. José Elías Leal, alcalde de Reynosa, con la confianza que le hablo a usted le pido por favor en nombre de todos los deportistas de natación de Reynosa, que creo que yo puedo representar con mi voz a ellos, le pedimos que le ponga a la alberca municipal José de Jesús Robinson, el único deportista de Reynosa, Tamaulipas que ha figurado en Juegos Olímpicos, no es posible que no se le tome en cuenta, comentó enérgicamente.EL INICIO DEL ÉXITOEn un breve viaje al pasado fue en 1954 cuando Ernesto Lucio, con apenas 17 años, tuvo su primer encuentro con aquel entonces un pequeño Pepe Robinson de 11 años, en una alberca de McAllen. Sus familias coincidieron en el mismo lugar y sin conocerse comenzaron a platicar para pasar un rato agradable. Ernesto Lucio formó su propio equipo de natación y clavados en la alberca La Laguna y con el paso del tiempo se dieron a conocer producto a las buenas exhibiciones que daban en los enfrentamientos que sostenían contra Deportivo Matamoros y Chávez, posteriormente invitarían a participar a escuadras de Ciudad Victoria y Monterrey.Fue en el verano de 1956 cuando Robinson González se unió al plantel y fue donde empezó el trabajo de Ernesto Lucio de perfeccionar el don con el que contaba su pupilo más querido, al cual le dedicó mucho tiempo en la alberca.Siempre iba para adelante y él donde veía un charco se aventaba un clavado porque él era una persona que poseía talento muy especial en el agua, le fascinaba y si era posible estar las 24 horas se quedaba, pero lo teníamos que correr, dijo con risas al recordar el arduo trabajo que le imprimía, pero también su contagioso buen humor. Él era un chamaco y lógico como todo un chamaco, era inquieto, travieso, juguetón porque el siempre fue juguetón, pero ya en la hora de los entrenamientos yo lograba se aplacara un poco y se concentrara en los entrenamientos, mencionó alegremente. Ernesto Lucio continuó trabajando con Pepe Robinson y las horas de entrenamiento dieron resultado en los Juegos Juveniles de la Revolución, competencia en la que Mario Tovar, entrenador de la selección mexicana de natación, se dio cuenta del nivel y buena técnica del reynosense, inmediatamente lo unió a sus filas y fue ese el momento en que inició la travesía de andar en los trampolines internacionales.
A TEMPRANA EDAD. Con la edad de 11 años ‘‘Pepe’’ Robinson daba sus primeros clavados.