La oficina de la Alta Comisionada de la ONU para Derechos Humanos (ACNUDH) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) cuestionaron la decisión de Austria de imponer la vacuna obligatoria contra el covid-19 y ordenar el confinamiento a las personas no vacunadas para frenar la propagación del virus.
“El bloqueo selectivo de grupos específicos puede tener implicaciones de derechos humanos y principios éticos”, dijo en rueda de prensa en Ginebra la portavoz de la OMS, Fadela Chaib, a pregunta expresa de Apro sobre las medidas que anunció Austria en las que será obligatorio a vacunarse a partir del 1 de febrero 2022.
Chaib reconoció que la vacunación obligatoria no está en la "caja de herramientas" que promueve esta entidad para frenar la pandemia.
"Las políticas de inmunización son decisiones nacionales y los países deben decidir sobre ellas. Las directivas de la OMS están dirigidas a demostrar el beneficio y la seguridad de las vacunas para lograr la mayor aceptación posible de éstas, en lugar de imponer vacunaciones obligatorias", afirmó.
La OMS cree que los países deben seguir un enfoque basado en una evaluación del riesgo de su propia situación epidemiológica para controlar la infección y frenar la propagación del virus, indicó.
Lo que aconseja la OMS es que “los gobiernos deberían continuar haciendo el esfuerzo para asegurar que la vacuna esté disponible y accesible para todos los grupos prioritarios”.
Además, cada individuo tiene un papel que desempeñar en esta pandemia, continuó Chaib, todo el mundo debería seguir usando mascarillas, mantener la distancia, abrir las ventanas, cubrirse al toser y estornudar, lavarse las manos con regularidad y vacunarse tan pronto como sea su turno.
Austria, que cuenta con un 66% de personas vacunadas, uno de los más bajos de Europa, anunció el confinamiento solamente para las personas no vacunadas, pues los casos han aumentado de manera estrepitosa desde que comenzó el invierno.
Sin embargo, hace unas horas luego de que el jueves se registraran 15 mil 145 casos, las autoridades austriacas anunciaron un confinamiento general para toda la población y la vacuna obligatoria a partir de febrero.
Vacunación voluntaria
Por su parte, la portavoz del ACNUDH Liz Throssell, también en respuesta a Apro, remarcó que una medida restrictiva, como la de imponer la vacunación obligatoria para frenar el aumento de casos y decesos por covid-19, debe tener "razones sanitarias legítimas" y cumplir con ciertos requisitos.
"Basándonos en principios generales de derechos humanos, lo que podemos decir es que la restricción de derechos por razones sanitarias legítimas, y eso incluye la vacunación obligatoria, debe cumplir con ciertas condiciones que están establecidas en el derecho internacional", precisó Throssell.
Argumentó que "los gobiernos deben hacer todos los esfuerzos a su alcance para convencer a la población de vacunarse" de forma voluntaria.
Además, las medidas o acciones que se tomen "deben ser proporcionales a los intereses que están en juego y a la meta que se persigue, y deben ser lo menos intrusivas posible”.
Según Throssell, obligar a vacunarse debe ser objeto de una ley, considerarse indispensable para conseguir el objetivo legítimo que se busca y responder a una necesidad social urgente.
Finalmente, la funcionaria del ACNUDH sostuvo que una medida de este tipo “no debe ser discriminatoria”.