Detiene EU importación ilegal de fármacos para ejecuciones

Dos estados, Arizona y Texas, intentaron importar ilegalmente de India un fármaco para su uso en las ejecuciones, pero la Administración de Alimentos y Drogas (FDA) de Estados Unidos, detuvo los envíos, de acuerdo con documentos obtenidos por el periódico Arizona Republic y el sitio de noticias BuzzFeed News.

Dallas, TexasLos documentos muestran que los envíos de tiopental sódico fueron decomisados por la FDA en los aeropuertos de Phoenix y Houston a finales de julio e iban dirigidos al Departamento de Correcciones de Arizona y al Departamento de Justicia Criminal de Texas.La FDA ya había confiscado antes una importación similar de tiopental sódico que intentó realizar el Departamento de Servicios Correccionales de Nebraska.De acuerdo con los documentos obtenidos por el Arizona Republic, el Departamento de Correcciones de Arizona compró mil frascos del tiopental sódico anestésico a un costo de 27 mil dólares.El nombre y la información del vendedor están tachados en los documentos, pero el periódico informó que una oferta para vender la droga a Arizona es prácticamente idéntica a una oferta enviada a los funcionarios de prisiones en Nebraska por Harris Pharma, una compañía farmacéutica en India.Autoridades de Nebraska no han ocultado sus intentos para importar el fármaco, a diferencia de Texas y Arizona que se acogen a leyes de secrecía para no revelar quién les surte el medicamento.El tiopental sódico es anestésico antiguo, que data de antes de la promulgación de la Ley de Alimentos, Medicamentos y Cosméticos de 1938 y por lo que nunca ha sido aprobado para su uso por parte de la FDA.Arizona, Texas y otras entidades que aplican la pena de muerte han estado batallando desde hace varios años para obtener por vía legal los fármacos necesarios para la inyección letal.La escasez es propiciada por la negativa de las compañías farmacéuticas a suministrar los medicamentos necesarios para realizar las ejecuciones y de las farmacias para preparar los compuestos necesario para asegurar una muerte rápida.Varias de las compañías farmacéuticas con sede en Europa, donde se tiene una larga tradición de oposición a la pena de muerte, han dejado de vender estos medicamentos a los sistemas penitenciarios de las entidades estadunidenses que aplican el castigo capital.Algunas entidades se han visto forzadas a recurrir a farmacias de compuestos, que fabrican fármacos personalizados bajo pedido y adoptan nuevas mezclas no probadas, para abastecerse de lo necesario para conducir las ejecuciones.Ohio decidió la semana pasada suspender la aplicación del castigo capital en esa entidad hasta 2017, en tanto resuelve el problema de abastecimiento de fármacos para la inyección letal.Por su parte, autoridades en Oklahoma, mantienen también suspendidas las ejecuciones, mientras se investiga cómo fue que se utilizó un fármaco equivocado para detener el corazón de un reo, durante una ejecución efectuada en enero pasado.