CIUDAD DE MÉXICO.- Tan solo en México el 60 por ciento de los casos de cáncer fueron detectados en estado avanzado, de acuerdo con datos de la Sociedad Mexicana de Oncología.
Por ello son esenciales los chequeos médicos, ya que entre el 30 y el 50 por ciento de los cánceres se pueden evitar de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), advierte el médico Francisco Olguín Sánchez.
El pasado viernes 4 de febrero se celebró el Día Mundial contra el Cáncer, promovido por la OMS, el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer y la Unión Internacional contra el Cáncer con el objetivo de aumentar la concienciación y movilizar a la sociedad para avanzar en la prevención y control de esta enfermedad.
En entrevista, Olguín Sánchez advierte que el cáncer puede estar determinado por dos categorías: factores de riesgo modificables y no modificables.
"En el primer caso, pueden presentarse predisposiciones de forma genética que por consanguinidad determinen la existencia de antecedentes de la enfermedad en la familia; puede haber genes anormales que se transmiten de una generación a otra.
"Sin embargo, muchas veces las personas en la misma familia llegan a padecer cáncer por compartir hábitos de consumo que incrementan la probabilidad de desarrollar la enfermedad, y no necesariamente porque comparten genes", explica Olguín Sánchez, director médico para el portafolio de Oncología en Pfizer México.
Esto último nos lleva a los factores de riesgo modificables, que implican que las personas hagan cambios en su estilo de vida para evitar el cáncer. En este rubro entran hábitos y adicciones como el tabaquismo, alcoholismo, sedentarismo, consumo de alimentos calóricos, bebidas azucaradas y falta de ejercicio (que terminan causando desórdenes alimenticios como la obesidad).
Las estadísticas generales del Instituto Nacional de Cancerología señalan que el 30 por ciento de los cánceres se deben a estos factores.
Asimismo, existen otros factores como la alta exposición al sol (rayos UV) y estar en contacto con materiales radioactivos o ambientes contaminados.
Vale la pena recordar que el cáncer no discrimina ninguna condición demográfica y puede ocurrirle a cualquiera en cualquier momento. La recomendación es que todas las personas estén alertas sobre cualquier cambio en su cuerpo y que incluso, sin llegar a notar alguna anomalía, acudan con su médico para su revisión completa de forma periódica.
¿Cuál es la situación actual del cáncer en el mundo?
El cáncer es uno de lo mayores problemas de salud pública a nivel mundial, las estadísticas más completas proporcionadas por el Global Cancer Observatory (Globocan), nos hablan de que a nivel mundial existe una incidencia de más de 19.2 millones de casos con una mortalidad de más de 9.9 millones, lo que lo posicionaría como una de las principales causas de muerte en el mundo y como la segunda causa de muerte en el continente americano de acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), siendo que el 70 por ciento de estas muertes ocurren en países de ingresos bajos y medianos.
En este contexto, ¿cuál es la situación en México?, ¿la atención y prevención en el País es suficiente y adecuada?
El cáncer es una de las enfermedades no transmisibles con mayor impacto en México. Según Globocan, en el año 2020 esta enfermedad cobró la vida de más de 90 mil 222 personas y tuvo una incidencia de 195 mil 499 casos. Panorama que vislumbra que aún existen muchas áreas de oportunidad en las que se puede trabajar especialmente para paliar las brechas en los procesos de detección temprana, diagnóstico y tratamiento con calidad óptima.
Aunque México es uno de los países de América Latina que considera dentro de sus políticas públicas de salud la atención oncológica, aún se puede optimizar mucho más la atención con un enfoque integral, mejorar los tratamientos, actualizar las guías de tratamiento y los materiales e información. Este último punto es esencial, ya que existen personas que por situaciones demográficas o contextuales aún no tienen al alcance información acerca de la importancia de la detección temprana; por ello es importante brindar todas las herramientas en la medida de lo posible para este proceso.
Seguir por ese camino puede ser la diferencia para revertir la situación actual; el diagnóstico de cáncer no tiene que ser una sentencia de muerte.
¿Cuáles son los avances en detección y tratamientos médicos en los últimos años?
Afortunadamente en los últimos años se han suscitado importantes avances contra la detección y el tratamiento médico. Desde Pfizer, hemos estado completamente enfocados en la creación de terapias innovadoras dirigidas principalmente a la llamada Medicina de Precisión, que consiste en crear avances tecnológicos que permitan adaptar el tratamiento en función de las necesidades y características individuales de cada paciente.
Un ejemplo de esto son las pruebas de biomarcadores que sirven para clasificar a los pacientes por su riesgo de ciertas enfermedades y así caracterizar con precisión un tratamiento basado en su fenotipo (los rasgos físicos de un organismo). En ese sentido, esta prueba puede ayudar a las personas con cáncer a determinar si existen anomalías en el ADN de los tumores así como a detectar la composición de proteínas presentes en el tumor, permitiendo seleccionar la terapia ideal según el tipo de cáncer.
Otro gran avance es que en los últimos años se han actualizado las guías de tratamiento estándar de los pacientes. Este avance científico es muy importante particularmente porque amplía la gama de blancos terapéuticos con los que se puede detectar mutaciones en los pacientes y hacer una medicina personalizada.
Esto representa un dramático salto en la sobrevida y aumento en la calidad de vida.