El rapero ASAP Rocky está enamorado y considera que Rihanna es el amor de su vida, así lo dio a conocer en la revista “GQ”, donde confirmó el romance.
El músico neoyorquino aparece en la portada de la más reciente edición de la revista, donde llenó de elogios a su novia, la intérprete de temas como “Umbrella” y “Diamonds”.
“Es el amor de mi vida, mi chica. Todo en la vida es mejor, mucho mejor cuando has encontrado a la persona definitiva. Ella sola equivaldría a un millón de las anteriores. Creo que cuando lo sabes, lo sabes. Ella es la definitiva”, expresó.
LO HACE OFICIAL
Las versiones sobre un supuesto romance entre ambos empezaron a circular en 2020, sin que ninguno negara o confirmara algo, sin embargo, en esta ocasión, ASAP Rocky no sólo confirmó la relación, sino que contó lo bien que la pasaron en Barbados país de su novia, lugar paradisiaco donde viajó recientemente la feliz pareja.
El rapero contó que Rihanna lo ha asesorado durante el proceso de producción de su esperado disco, que cuenta con la participación del músico británico Morrissey, exlíder de la banda The Smiths.
PROBLEMAS POR VIOLENCIA
En agosto de 2019, un tribunal de Estocolmo condenó al rapero estadounidense a prisión en suspenso por violencia, a raíz de una pelea que protagonizó en la capital sueca.
El famoso rapero, y las dos personas de su equipo juzgadas con él, “son declarados culpables de violencia y condenados a una pena en suspenso”, escribió el tribunal de Estocolmo en su veredicto.
“Agredieron a la víctima golpeándola y dándole patadas cuando yacía en el suelo”, añadió el tribunal, rechazando el argumento de legítima defensa.
El músico neoyorquino, que no estaba presente en el tribunal cuando se leyó el fallo, fue arrestado tras una pelea en la calle el 30 de junio y mantenido en detención porque existía “riesgo de fuga” al extranjero.
Liberado el 2 de agosto de aquél año, tras su proceso judicial, ASAP Rocky regresó inmediatamente a Estados Unidos en su jet privado.
El caso conmocionó el mundo del hip-hop y llegó a las más altas esferas políticas, provocando tensiones en la relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Suecia. El presidente de ese momento, Donald Trump, acusó a Estocolmo de menospreciar a los negros estadounidenses y envió a su emisario especial para Asuntos de Rehenes.