El rey de Carnes Guzmán regresó para reclamar su lugar de campeón y de esta forma continuar con la hegemonía que ha establecido en los recientes años en la Liga de Futbol Reynosa Ciudad Competitiva.
La cancha Nexus se pinto completamente de naranja y blanco con la celebración de los jugadores al obtener el título por marcador de 3-1 sobre su similar Atlas para de esta manera bordar su séptima estrella, de las cuales seis han sido en forma consecutiva.
Carnes Guzmán llegaba con pronósticos favorables al ser el líder del torneo regular, pero enfrente tenía al último campeón de la justa que se trataba del Atlas, por lo que la afición hizo una gran entrada en sus alrededores por la gran final que iban a ofrecer los protagonistas.
La "Naranja Mecánica", estuvo en todo momento concentrado y así lo dejó en claro en el amanecer del primer tiempo cuando Andrés Rincón aplicó su viveza para sorprender a la defensa con disparo raso que se conjugo con error terrible del guardameta al pasársele entre los brazos.
El playera 30 de Pablo Pérez dio varios avisos de peligrosidad y uno de ellos fue el disparo potente que terminó por estrellarse en el travesaño, pero minutos más tarde metió cabezazo que se incrustó en la base de la portería y la buena suerte le sonrió con el rebote para mandar guardar la redonda y desatar el festejo.
Antes de irse al descanso parecía que el Atlas recortaba la distancia, pero la figura del portero Carlos Ramírez se engrandeció con dos atajadas de alto grado de dificultad para mantener intacta su cabaña.
Durante el segundo lapso Carnes Guzmán realizó algunos cambios para fortalecer en lo físico en sus tres sectores (defensa, mediocampo y delantera), además de darle circulación a la pelota sin dejar de hacerse presente en el área enemiga.
Catalogado como el hombre determinante en todas las finales que ha disputado Carnes Guzmán apareció en el momento oportuno Christian Marín "Manolo", que le plasmó a la redonda con toda la calidad que cuenta en el tachón izquierdo al hacer un golazo de tiro libre directo para de esta manera dar el cerrojazo.
Pablo Pérez fue efectivo en el ataque y con certero cabezazo metió el segundo gol de la gran final.