Budapest, Hungría.-Red Bull recompensó a un pequeño fanático de Sergio Pérez en el Gran Premio de Hungría.
En los primeros minutos de la primera sesión de entrenamientos libres, en las pantallas se enfocó a un niño que lloraba por el accidente del mexicano en la cueva 5.
Con playera de AlphaTauri, el aficionado abrazaba a su papá, quien sí portaba un jersey de Red Bull con el número 11, que corresponde a Checo.
Después de la actividad en pista, padre e hijo fueron invitados a los pits del equipo de las bebidas energéticas para convivir con Pérez.
El tapatío saludó al pequeño, conversó con él, le mostró su casco y convivió con el resto de los integrantes de la escudería.
El niño también pudo disfrutar de la práctica 2 con todo y audífonos en el paddock del equipo.