El recibimiento y aliento que Venus Williams recibió en el estadio Arthur Ashe la tarde del martes no fue el mismo brindado a su hermana, Serena, la noche previa, tampoco lo fue el resultado.
Al tocarle jugar frente a miles de butacas azules vacías, en una arena muy silenciosa al arranque, Venus se despidió en la primera ronda del Abierto de Estados Unidos por segunda presentación consecutiva al caer 6-1, 7-6 (5) ante Alison Van Uytvanck.
- “Ella ha tenido un tremendo impacto en el tenis femenino, en todo el tenis”, dijo Van Uytvanck. “Es una leyenda”.