El desempeño del monegasco, desde que debutó en la Fórmula Uno en 2018, no ha pasado desapercibido para Mercedes, quien lo ve como un posible sustituto de Lewis Hamilton cuando se retire.
Sin embargo, Leclerc no está interesado en correr para las Fechas Plateadas, sino que quiere arrebatarle la corona a Max Verstappen, de Red Bull, con ayuda de Ferrari, el equipo que lleva tatuado en el corazón.
“Sé que tienen miedo de que me vaya a Mercedes después de Hamilton, pero, sinceramente, no hubo negociación. Estoy feliz en Ferrari. Siento la ilusión de la afición, estoy emocionado de cumplir el sueño (mío y de todos) de ganar con el coche rojo”, dijo el conductor de 25 años.
En 2022, Charles lideró la Tabla General en las primeras carreras hasta que la fiabilidad del monoplaza, las estrategias en boxes y los accidentes lo relegaron a la segunda posición.
Así que con el SF-23 y una reestructuración en la Scuderia pisará el acelerador en la primera fecha del calendario, la cual está programada del 3 al 5 de marzo en Bahréin.
“Tendremos tres días de pruebas con todos nuestros competidores en breve, por lo que aún no puedo juzgar nuestro nuevo coche. Las sensaciones han sido buenas, pero sobre todo habrá que ver cómo se comporta frente a la competencia”, finalizó.