El esgrimista mexicano, Gibrán Zea, debutó en los Juegos Olímpicos con una "sufrida" victoria, pero acto posterior, quedó eliminado a manos del georgiano Sandro Bazadze.
Gibrán abrió su participación con un triunfo (15-13) ante el iraní Mohammad Fotouhi. Si bien vivió momentos de tensión, logró avanzar durante la ronda de sesenta y cuatro, como parte de la modalidad de sable varonil.
Horas después, regresó a la pista para enfrentar a su siguiente rival: Sandro Bazadze, oriundo de Georgia. Con astucia, Gibrán se lanzó a combate, luciendo una careta con la bandera mexicana.
Sin embargo, el georgiano terminó por imponerse (15-6) ante Zea, durante los 32vos de final. No por nada, Sandro es el segundo mejor esgrimista a nivel mundial.
Ésta fue la primera aventura olímpica de Gibrán Zea, a la espera de sumarse a más historias de los Juegos Olímpicos.