- Oviedo, España
Cuando uno llega al Principado de Asturias, de las primeras cosas que escucha es una historia que enorgullece a los habitantes de esta zona de España.
Hace 38 años, un ingeniero que trabajaba en la vieja fábrica de explosivos de La Manjoya construyó, de manera artesanal, un kart para su hijo.
El pequeño, de apenas tres años, se la pasaba corriendo en ese carro en el solar de la fábrica; ese niño era Fernando Alonso, quien, con el paso del tiempo, se convirtió en campeón del mundo de la Fórmula Uno y en orgullo de Asturias.
El dos veces monarca de la F1 tiene un museo en el Principado, un lugar en donde los aficionados pueden revivir la trayectoria del piloto, conocer detalles de su vida, ver todos los autos que ha conducido en el Gran Circo y mucho más.
Ubicado en el Concejo Asturiano de Llanera, a unos 15 minutos de Oviedo, el Museo y Circuito Fernando Alonso muestra más de 300 artículos que han acompañado a Alonso a lo largo de sus 38 años en el automovilismo.
La entrada al Museo no podía ser mejor, lo primero que encuentras es ese kart que le construyó su padre y con el que comenzó su historia como corredor, alrededor puedes ver sus trofeos infantiles, sus autos, guantes, toda la historia del asturiano en karts.
Pero lo más impactante está al entrar a la segunda sala, cuando encuentras los primeros autos de F1 que utilizó Fernando y, al fondo, los Renault con los que logró sus dos títulos del mundo.
Trofeos, cascos, guantes, nomex, fotografías y algunas frases del piloto español pueden verse a lo largo del museo.
Antes de pasar a la exposición de la planta alta, hay una mini sala de cine, en donde puedes conocer la historia de Alonso a través de un video.
Arriba, el resto de sus autos de F1. La parte de Ferrari es la más impresionante, pero también la colección de cascos que le han dedicado otros pilotos del Gran Circo, como Checo Pérez, Lewis Hamilton, Esteban Gutiérrez y un largo etcétera.
Antes de salir rumbo a la pista de kart, la tienda de recuerdos no puede faltar.
Para quienes laboran en el museo, lo más valioso es la cercanía de Fernando Alonso, pues visita su museo unas 4 o 5 veces al año y siempre tiene detalles para quienes cuidan su legado.