Con la moral en alto tras conseguir su pasaje a la repesca del torneo, Pumas buscará su primer título en 11 años y de paso extender el dominio de clubes mexicanos en la región hoy miércoles, cuando visite a los Seattle Sounders por la final de la Liga de Campeones de la CONCACAF.
Usando un cuadro alterno y con varios jóvenes, los universitarios derrotaron al líder Pachuca el domingo para asegurar su sitio en la reclasificación, pero hubo poco tiempo para festejar porque de inmediato pusieron su enfoque en Seattle.
Pumas dejó ir una ventaja de dos goles en la ida y el enfrentamiento quedó empatado 2-2. Seattle tiene a favor que cerrará en el Lumen Field, un escenario donde suele pesar el ruidoso apoyo de la afición. Hoy no será distinto: más de 61 mil boletos ya se vendieron.
Pumas disputa su primera final regional desde el 2005, cuando perdieron ante el Saprissa de Costa Rica.
Esa fue la última vez que un equipo mexicano no salió con el trofeo de campeón de la CONCACAF, una racha de 16 años que parece peligrar.
Seattle busca ser el primer equipo de la MLS en ganar la corona de la CONCACAF desde el Galaxy de Los Ángeles en 2000, y el primero de la liga que se clasifica a un Mundial de Clubes.
Los Sounders consideran que podrían vender todavía más boletos para el encuentro. Podrían superar el récord de mayor asistencia en el torneo. El mismo corresponde a los 66 mil 208 que el América de México convocó al recibir al Herediano de Costa Rica en las semifinales de la edición 2014-15.
Seattle no recibía a tanta gente desde la final de la MLS en 2019 ante Toronto FC, cuando 69 mil 274 espectadores presenciaron el partido.