Santa Clara, California
Brock Purdy no ha tenido que lidiar con muchas salidas complicadas en su breve carrera en la NFL.
Eso fue lo que hizo que su actuación de cuatro intercepciones la noche del lunes contra los Ravens de Baltimore resultara inusual, al no lograr un balance correcto en las decisiones de cuándo arriesgarse y cuándo proteger el balón.
"Fue simplemente no tener la mentalidad correcta como QB, teniendo que ser agresivo para lanzar, para hacer una gran jugada, pero también, a la hora de tirar, no quieres volver a entregar el balón. Ese es el aprendizaje, volver atrás y decir que cada jugada tiene vida propia", dijo el jueves.
La noche de Purdy tuvo un mal inicio cuando forzó un pase en la zona roja a Deebo Samuel en la primera serie de San Francisco, sólo para que el safety Kyle Hamilton se pusiera frente a él para una intercepción.
Previo a eso, dos grandes pases a George Kittle habían tenido a San Francisco en la zona de anotación, volviendo a Purdy demasiado agresivo para hacer un pase perfecto.
"En retrospectiva, no fue una decisión adecuada, no fue el movimiento más inteligente como QB. Eso es algo en lo que necesito crecer. Tienes que jugar en la manera correcta y no sólo seguido por la emoción y todo lo que sentiste en jugadas previas", señaló.
El entrenador en jefe Kyle Shanahan describió las otras tres intercepciones más como mala fortuna que como una mala decisión. Dos desvíos llevaron el balón a las manos de los defensores en lugar de caer al suelo y otra intercepción llegó después de que Purdy fue golpeado mientras lanzaba.
Su mayor preocupación fue la manera en la que Purdy jugó después de lanzar para su cuarta intercepción en el tercer cuarto.
"Es difícil tener mucho fútbol (americano) después de cuatro intercepciones, especialmente cuando estás por debajo con este tipo de defensa. Creo que fue la mejor experiencia para él, como sentirlo, saber que estaba pasando y por qué, y seguir teniendo que lanzar y jugar", señaló Shanahan.
Si bien la mala actuación resultó un duro golpe a las esperanzas de Purdy de ganar el premio al Jugador Más Valioso, hizo poco para disminuir la confianza que sus compañeros de equipo, quienes lo respaldaron públicamente después del encuentro y expresaron su creencia en que la meta del equipo es ganar el Super Bowl.
Purdy sigue liderando las categorías más importantes para los quarterbacks de la NFL; rating (112.2), yardas por oportunidad (9.7) y se encuentra segundo en yardas (4,050) y pases de touchdown, además de tercero en porcentaje de pases completos.