- Barcelona, España
"Se me acercó y me dijo: '¿Es que no sabes quién soy?'. Y yo: 'No'. Me dijo: 'Me llamo Dani, juego a la petanca en Hospitalet'. Recuerdo que me cogió la mano y me la puso como en su parte baja. Me volvió a decir que nos fuéramos. Yo dije que no. Empecé a tener muchísimo miedo y pensé: '¿Y si me pone algo en la bebida? ¿Y si le hace algo a mi amiga?' Pensé de todo en muy poco rato", declaró.
"Él me hizo como un gesto y fue cuando le dije a mi prima: 'No sé si voy'. Y me dijo, 'bueno, pues no pasa nada, y me hizo el gesto de vete y ya está. Yo en ningún momento sabía dónde estaba yendo. Yo recuerdo dirigirme donde estaba él.
"En ese momento dije: 'Seguro que es o una puerta hacia la calle o es una sala VIP o es otra zona de la discoteca'. Él abrió la puerta, recuerdo, y yo entré, y cuando entré vi dónde me estaba metiendo. Vi que era un lavabo diminuto, era muy muy enano. Solo tenía un retrete y para lavarte las manos.
"Recuerdo que me levantó el vestido y me hizo sentarme encima de él. Recuerdo decirle 'no puedo, no puedo, me tengo que ir, no quiero', y él me empezó a decir muchísimas cosas. Cuando posteriormente me puso en el suelo yo recuerdo quedarme en shock, no sabía qué hacer allí.
"Sé que no sólo me cogió del pelo y me hizo como ponerme de rodillas delante de él. En ese momento vi un tatuaje. Como de arco. Dije: 'Este tío me va a hacer mucho daño'. Entré en ese momento. Tuve mucho miedo. La cara, el tatuaje... y hasta día de hoy son escenas que me vienen mucho".
Dani Alves sigue en prisión preventiva, donde se encuentra desde hace 4 meses acusado de la presunta violación a la joven en la discoteca catalana Sutton, la noche del 30 al 31 de diciembre del pasado año.