El siguiente capítulo de la carrera de Messi inicia el viernes en la casa del Inter Miami

Quiero dar las gracias a toda la gente de Miami por el recibimiento que me dieron desde que llegué acá, dijo Messi a la multitud

FORT LAUDERDALE, Florida, EE.UU.— Los asientos del estadio DRV PNK se llenaron rápido con aficionados ansiosos de dar un vistazo a la nueva superestrella del Inter Miami.

Lionel Messi, a quien se podría considerar el mejor jugador de todos los tiempos, estaba parado en una pasarela en el medio del campo mirando su nuevo hogar.

"Quiero dar las gracias a toda la gente de Miami por el recibimiento que me dieron desde que llegué acá", dijo Messi a la multitud.

El siguiente capítulo en la histórica carrera del futbolista de 36 años comenzará aquí. No en el Camp Nou, en Barcelona ni en el Parque de los Príncipes, en París. Será en el estadio DRV PNK del Inter Miami, un lugar acogedor en Fort Lauderdale, Florida, decorado con los colores rosa y negro del equipo.

Messi debutará con el Inter este viernes, en contra de Cruz Azul de México en la League's Cup. El entrenador argentino Gerardo "Tata" Martino le dijo a ESPN el miércoles que no se ha decidido si Messi y su compañero recién llegado Sergio Busquets, serán titulares o cuánto tiempo jugarán.

En junio, cuando el siete veces ganador del Balón de Oro anunció al mundo que se uniría a Miami, el equipo, que está en su cuarta temporada, tuvo que apresurar su idea de renovar el estadio, para dar cabida a la mayor atención que genera la llegada del astro.

Por ahora el Inter Miami celebra sus partidos como local en un estadio para 18.000 personas que está 40 minutos al norte del sitio en Miami donde el equipo desde construir un complejo permanente. El estadio DRV PNK fue construido donde estaba previamente en estadio llamado Lockhart, que originalmente fue diseñado para deportes de escuela secundaria.

Se encuentra frente al Aeropuerto Ejecutivo de Fort Lauderdale, adonde Messi y su familia llegaron la semana pasada.

También la semana anterior se agregaron gradas plateadas en las esquinas del noreste y sureste, incrementando la capacidad por cerca de 3.000 asientos. Eso todavía se queda corto de las cerca de 100.000 butacas en el Camp Nou, donde Messi saltó al estrellato internacional.

"Probablemente nunca podrás agregar suficientes asientos para albergar todo el interés que el equipo está experimentando", dijo Stephanie Toothaker, consejera externa del Inter Miami. "Creo que hemos hecho todo lo que hemos podido en muy poco tiempo".

David Beckham, copropietario del Inter, puede entender el ajuste que se requiere al venir del extranjero para jugar en la MLS. En 2007, Beckham se integró al Galaxy de Los Ángeles después de pasar su carrera jugando en Old Trafford, con Manchester United, y después en el estadio Santiago Bernabéu, con el Real Madrid.

La liga era muy diferente cuando Beckham emprendió aquella mudanza.

"Creo que había 15 equipos en la liga en ese momento", recordó Beckham. "No muchos equipos tenían estadios específicos para el fútbol. Ahora, hay 30 equipos en la liga y la mayoría tienen sus propios estadios".

El promedio de asistencia esta temporada en la MLS está ligeramente por debajo de los 23.000 espectadores, Inter Miami promedia 16.482. En junio, Messi jugó con Argentina un partido amistoso contra Australia en Beijing, frente a más de 50.000 personas.

En las semanas posteriores al anuncio de Messi, algunos especularon que el equipo podría mudar sus partidos como local al estadio Hard Rock, con capacidad de 65.000 espectadores en Miami Gardens, casa de los Dolphins de la NFL y uno de los recintos la Copa del Mundo de 2026. Varios equipos de la MLS aplican soluciones similares.

Atlanta United y Charlotte comparten sus estadios con los Panthers y los Falcons de la NFL. El Mercedes-Benz en Atlanta puede recibir a unas 70.000 personas para encuentros de fútbol americano y 45.000 para la MLS.

El Bank of America Stadium en Charlotte tiene 74.000 butacas. El primer partido de Charlotte en la historia como local impuso el año pasado un récord de asistencia de la MLS, con 74.479 aficionados.

Ésa podría ser la cantidad de gente que asista a ver a Messi jugar con su nuevo equipo en la liga.

El copropietario del Inter, Jorge Mas, dijo el martes que el plan consiste en jugar los partidos restantes de la temporada regular como locales en el DRV PNK. Sin embargo, existe la posibilidad de disputar ciertos cotejos en el Hard Rock Stadium.