Denuncian sacrificio ilegal de una mascota
Laredo, Tx.- Una familia local denunció el sacrificio de “Max”, la mascota de la casa, presuntamente sin seguir el procedimiento legal. Las autoridades municipales alegan que todo se hizo bajo una ordenanza que lo permite luego de ser entregado por vagar en la calle. Irasema Garza, dueña de “Max”, dijo que solicitó una investigación profunda para determinar por qué razón se sacrificó a su perro el 22 de julio en el centro de cuidado animal que opera el gobierno de Laredo, sin esperar las 72 horas que marca la ley. La mascota, un pastor belga malinois, de 2 años, fue entregado al centro por una mujer que lo encontró en la calle en el vecindario de Villas de San Agustín la mañana del sábado. El can se salió de su casa distante a medio kilómetro y al caminar por la calle fue recogido por una mujer que decidió llevarlo a su casa. Luego pensó llevarlo al centro animal municipal pero como no traía microchip, no se pudo localizar a los dueños. “Esta persona le dijo claramente al empleado que no lo sacrificara y que si se decidía ponerlo en adopción, ella estaba interesada en adoptarlo”, explicó Garza. La mascota fue entregada a la 1:30 de la tarde del sábado y a las 2:00 cerró el centro, haciéndose la determinación de sacrificarlo porque traía una herida en una pata. “La herida ya estaba muy pequeña, estaba curada, la recibió porque lo atacaron unos perros en el patio de nuestra casa, pero no estaba infectada ni tampoco traía lesiones; no se justifica decir que lo sacrificaron porque estaba sufriendo”, afirmó la quejosa. Los dueños de “Max” se enteraron hasta el lunes que el perro había sido llevado al centro animal y cuando acudieron a buscarlo se llevaron la desagradable sorpresa de que ya no existía. “Nosotros pensamos que no se siguió el procedimiento, había que esperar 72 horas antes de hacer algo así y no lo hicieron, todo está muy dudoso”, mencionó. Homero Vázquez, director del centro animal, dijo que efectivamente el can entró a la hora señalada y debido a que traía una herida en una pata, se hizo una evaluación y el oficial determinó que era necesario ponerlo a dormir. “El animal no traía microchip y bajo esas condiciones era imposible saber quiénes eran sus dueños, por eso insistimos que cumplan con la ordenanza”, indicó. Mencionó que la sección 67 letra A del código animal municipal establece que se debe dar un período de 72 horas para dar oportunidad de detectar a los dueños de un animal cuando llegue al Centro. “Pero la letra D de esta misma sección establece que se puede sacrificar antes si se determina que el animal está sufriendo; nosotros actuamos bajo esta ordenanza”, declaró. Vázquez indicó que se necesita mayor ayuda del público para poner el microchip a sus mascotas a fin de evitar situaciones lamentables como ésta. “Vamos a entregar a la familia Garza toda la información que nos pidieron, el cadáver del perro no se puede dar porque al ponerle una inyección química se considera material peligroso y se lleva al relleno sanitario conforme a la ley”, añadió.