A pesar de que la probabilidad de una contrarreforma energética en la Constitución ha disminuido tras las elecciones, el daño a la certidumbre de los inversionistas continuará afectando el desarrollo de la industria y para el 2024 la construcción de nuevas centrales será nula.
Patricio Gamboa Gracia, socio fundador de la consultora Energy Intelligence Consulting, señaló que en los últimos tres años han concluido o se están construyendo centrales eléctricas que corresponden a proyectos que tenían un avance previo.
Sin embargo, consideró que el impulso de estos proyectos menguará para el 2023 y probablemente concluirá para el 2024.
“Los (proyectos) que no se han terminado de construir se van a terminar, creo que los últimos estarían entrando en el 2022 y algunos que se hayan quedado atorados en el 2023”, señaló Gamboa
“En dos años, en el 2023, ya va a haber problemas más serios de falta de energía y no va haber proyectos nuevos que entren”.
El especialista consideró que para el 2024, además de la incertidumbre actual, se añadirá la duda sobre si la nueva Administración continuará con la misma política energética que la actual, hará poco probable que mejore la perspectiva.
“Se está deteniendo la inversión privada y nos va a cobrar factura”, apuntó.
Gamboa explicó que las centrales solares tardan alrededor de cuatro años entre desarrollo (estudios, permisos y financiamiento) y construcción, los proyectos eólicos tardan entre 5 y 7 años, y las centrales de ciclo combinado llevan aproximadamente 5 años.
En este sentido, de acuerdo con Cenace, durante mayo de este año el Sistema Eléctrico Nacional presentó 200 incidentes de estado operativo en alerta, debido a que el margen de reserva cayó por debajo del 6 por ciento.
Ayer, Moody’s informó que no vislumbra un aumento de la inversión privada en el sector eléctrico mexicano en los próximos tres años, tras una serie de polémicos cambios al marco regulatorio en la industria, que podrían afectar algunos contratos ya existentes.
Recientemente, Grupo REFORMA publicó que frente a la demanda creciente y un margen de reserva al límite, se prevé que CFE programe apagones en algunas zonas en las próximas semanas para evitar un colapso generalizado del sistema eléctrico.