El pasado martes, el gobernador de Texas autorizó que la Guardia Nacional “aplicara las leyes de Texas, incluyendo el arrestar a personas que cruzan ilegalmente la frontera y violan la ley de Texas”. También “está ayudando en las primeras etapas de la construcción de barreras y muro fronterizos”.
A finales de julio, el gobernador ordenó la llegada de hombres y mujeres de la Guardia Nacional de Texas al Valle del Río Grande y las áreas que lo rodean para ayudar al Departamento de Seguridad Pública de Texas en sus operativos de seguridad en la frontera.
La movilización de las tropas hacia labores de vigilancia y detención de migrantes en la zona fronteriza, provocó que la Ciudad del Paso se quedara sin el banco de alimentos que era sostenido con ayuda de la guardia nacional.
La declaración que hizo en el mes de julio el gobernador Greg Abbott en el sentido de que “se necesitaba más personal en la frontera” significa que el único banco de alimentos local va a cerrar temporalmente una tercera sucursal, tras la probable salida de los últimos 30 miembros de la Guardia Nacional de Texas que fueron enviados a principios de este año para ayudar en esos sitios de distribución, señala El Diario de El Paso en su edición digital.
“Lo que nos dijeron es que el gobernador podría desplegarlos a la frontera, para resguardar ese lugar de personas que la cruzan y para prepararla para la construcción del muro”, comentó Susan Goodell, directora general de El Pasoans Fighting Hunger (Paseños Luchando contra el Hambre).
La oficina de Abbott no respondió a los correos electrónicos que solicitaban su comentario sobre el asunto. El Departamento Militar de Texas recibió preguntas a través de un correo electrónico que le envió El Paso Matters, pero no respondió en relación con el despliegue de la Guardia Nacional de Texas.
Goodell comentó que El Paso es el único banco de alimentos en Texas que no está funcionando porque perdió todo el apoyo de la Guardia Nacional.
“No sabemos por qué nuestra situación es diferente, tampoco sabemos si ellos van a ampliar la estadía de la Guardia Nacional de Texas y qué tanto tiempo será eso”, dijo Goodell a través de una llamada telefónica. “Vamos a vernos forzados a cerrar el lugar que está en el Oeste de la ciudad durante dos semanas, a partir de la próxima semana”.
| El Paso es el único banco de alimentos en Texas que no está funcionando porque perdió todo el apoyo de la Guardia Nacional.
Crecimiento exponencial
El Pasoans Fighting Hunger creció exponencialmente durante la pandemia, convirtiéndose en el tercer banco de alimentos más grande en la red nacional, detrás de Houston y Los Angeles, según dijo Zuani Villarreal, portavoz de la red Feeding America.
El banco de alimentos cuadruplicó la cantidad de alimentos que obsequia, de 32 millones de libras en el 2019 a 139 millones de libras en el 2020, a personas que necesitaban apoyo durante la pandemia.
Goodell comentó que la demanda se ha mantenido constante desde el mes de enero de este año, y que los otros 200 bancos de alimentos del grupo de organizaciones no lucrativas Alimentando a América también están en crisis debido a una demanda más alta que en la época previa a la pandemia.
Goodell señaló que esto ha reducido considerablemente la cantidad de ayuda mutua que los bancos de alimentos pueden otorgarse unos a otros. “Esto es un desastre, que ninguno de nosotros había visto anteriormente”, aseguró Goodell. “No es como los otros períodos de desastres en que 199 bancos de alimentos se ayudan unos a otros”.
Información conflictiva
La semana pasada, a través de una llamada telefónica, Goodell comentó que el Estado les proporcionó información conflictiva acerca de la extensión en la permanencia de la Guardia Nacional en otros bancos de alimentos, diciéndoles que las tropas podrían permanecer en otros lugares de Texas hasta septiembre, y posiblemente hasta diciembre.
Michael Guerra, jefe de recursos del Banco de Alimentos de San Antonio, comentó que experimentaron una reducción de 90 a 63 miembros de la Guardia Nacional, y no sabían si las tropas podrían permanecer más allá del 3 de septiembre.
“Ha sido una situación muy fluida con la Guardia Nacional de Texas, ustedes se darán cuenta a su tiempo”, dijo Guerra. Las tropas abandonaron El Paso desde principios de agosto, disminuyendo el número de soldados de 90 a 30.
A principios de agosto, el banco de alimentos cerró permanentemente dos mega almacenes debido a la falta de voluntarios para reemplazar a los soldados de la Guardia Nacional y a otras organizaciones que ayuden. Eso provocó un incremento en el tiempo de espera para las personas que tratan de obtener ayuda alimentaria.
Leonore esperó en la fila con su madre de 81 años, Annamarie, para recoger un carrito de supermercado lleno de alimentos en el Banco de Alimento Paseños Luchando contra el Hambre. La familia solicitó ser identificada por su primer nombre únicamente debido a que no desean ser reconocidas.
Ella ha acompañado a su madre cada viernes durante un año, para recoger la caja para adultos mayores para Annamarie y su esposo. Una vez al mes, los productos básicos son suministrados a través de un carrito de supermercado lleno de alimentos que también incluye vegetales y frutas de la estación.
“Agradecemos y usamos todo. Ha sido una excelente ayuda para nosotros”, dijo Leonore.
Muchas de las docenas de personas que esperaban en fila este viernes le comentaron que vienen de áreas en donde los almacenes de Horizon City y el Noreste de la ciudad les ayudaban antes de cerrar.
Goodell comentó que sin la ayuda de la Guardia Nacional, y el período que transcurrirá antes de que lleguen nuevos voluntarios de AmeriCorps, el lugar situado en la parte Oeste de la ciudad, sobre Doniphan Drive, necesitará reacomodar su operación de autoservicio debido a que habrá menos personas surtiendo las cajas y los carritos de supermercado.
El cierre podría ser permanente, dependiendo del número de voluntarios. El cierre podría “tener un impacto negativo más significativo” para la parte Oeste, dijo Goodell, debido a que no cuenta con comedores de beneficencia adicionales o almacenes de alimentos para satisfacer las necesidades del área.
“Hay mucha incertidumbre, y no tenemos una respuesta para esa pregunta”, dijo.
DISMINUYEN VOLUNTARIOS
Hasta el mes de agosto, Paseños Luchando contra el Hambre operaban cuatro “mega almacenes” para proporcionar carritos de comidas hasta para una semana para cientos de miles de familias que no tienen alimentos.
Los mega almacenes están abiertos cinco días a la semana, por un mínimo de cinco horas al día, a diferencia de muchos almacenes más pequeños, comedores de beneficencia, albergues, programas escolares que también atiende el banco de alimentos. Las organizaciones más pequeñas usualmente tienen horarios variables y suministros limitados para obsequiar.
Goodell comentó que el 85 por ciento de los alimentos distribuidos en El Paso se destinaban a cuatro mega almacenes y al Centro Kelly para la Ayuda para el Hambre, mientras que las filiales más pequeñas distribuían aproximadamente el 15 por ciento.
Debido a que los grupos de voluntarios disminuyeron durante la pandemia, Goodell comentó que el banco de alimentos dependía de la mano de obra que aportaba la Guardia Nacional, así como también de organizaciones no lucrativas locales y nacionales, para poder alimentar a la gente.