Tras ser abucheado en el evento donde el presidente Andrés Manuel López Obrador acordó que la presa El Zapotillo no operará a más del 60% de su capacidad y la cortina permanecerá a 80 metros para no inundar los poblados de Temacapulín, Acasico y Palmarejo, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, criticó la forma en que se llevó a cabo la asamblea informativa y los acuerdos que se tomaron.
“No es un asunto del cual podamos opinar cuando una propuesta en una asamblea a mano alzada con gente que no sabemos quiénes son ni de dónde vienen parecieran definir el rumbo que van a tomar temas tan complejos y tan difíciles como es el tema del agua”, respondió el mandatario cuando se le preguntó sobre el acuerdo tomado entre el presidente y la gente que asistió a la plaza de Temacapulín.
Durante la reunión, el mandatario federal dijo que los “técnicos de los pueblos” han pedido obras complementarias para garantizar que la presa no rebase el 60% de su capacidad en un temporal copioso y evitar la inundación de los tres pueblos; al respecto, Alfaro puso en duda la propuesta.
“Lo que no entendemos es lo que hoy se propuso exactamente, porque de lo que se habló es de grupos técnicos de las comunidades que yo no sé quiénes sean, ni conozco su propuesta, ni sé qué implique, y lo que se me hace, la verdad, poco serio es que nos inviten a una reunión en la que se van a exponer estas cosas de esta manera; no creo que sea una forma en la que se pueden definir proyectos técnicos de esta envergadura”, dijo.
Desde la pasada visita del presidente López Obrador a esta comunidad, el 14 de agosto pasado, los pobladores de Temacapulín realizaron asambleas con los expertos que los han apoyado en esta lucha durante 16 años para hacer una propuesta al mandatario federal, sin embargo, el gobierno de Jalisco ha quedado al margen de estas decisiones.
“Lo que nosotros hemos pedido y en lo que hemos insistido es en que ya nos dejemos de este tipo de reuniones, que se tomen las decisiones, que se etiqueten los recursos y que se retome la obra, porque las garantías están dadas de que no se van a inundar los pueblos y me parece que seguir alargando este tema no es la ruta correcta”, insistió Alfaro, quien indicó que el conflicto no ha terminado y se sigue aplazando la solución al problema.