Houston
Banderas de Estados Unidos, Texas y México ondearon a media asta el viernes mientras una carroza tirada por caballo y adornaba con flores blancas trasladaba el féretro verde que llevaba los restos de una soldado asesinada.
Vanessa Guillén, quien fue vista viva por última vez el 22 de abril, fue conmemorada casi cuatro meses después de que se presume fue asesinada por un colega en Fort Hood, una base del Ejército de Estados Unidos en Texas. Los dolientes se reunieron en la escuela secundaria César Chávez de Houston, en donde Guillén creció jugando futbol y soñando con unirse al ejército.
“Está muy contenta en donde está, a un lado de Dios y de la virgen María”, dijo su hermana Lupe Guillén. “Hoy no estamos aquí para exigir justicia o por política. Estamos aquí para recordar, honrar y respetar a Vanessa Guillen por su vida hermosa, su corazón tierno y su rostro hermoso”.
En un momento privado justo antes de entrar al auditorio de la escuela, en donde flores en tonos verdes y blancos, globos, imágenes religiosas y una fotografía de Guillén adornaban el escenario, familiares y amigos caminaron detrás del féretro acompañando a Guillén en una última vuelta alrededor del campo que frecuentó de adolescente. La madre y abuela de Guillén se sujetaban entre ellas mientras rezaban sollozando sobre el féretro.
El servicio religioso estuvo abierto al público y fue transmitido en línea. Está previsto que el funeral termine a las 8 de la noche, con sesiones de oración y testimoniales.
Lo que le sucedió a Guillén ha renovado los llamados para que haya cambios en la forma en que las fuerzas armadas abordan el abuso y el acoso sexual, desde Fort Hood hasta el Capitolio.
Natalie Khawam, quien representa a la familia Guillén, dijo que la familia está agradecida con el presidente Donald Trump porque la Casa Blanca ayudó a acelerar el proceso de entregarles a los familiares de Guillén sus restos para que pudieran tener un funeral.
Guillén desapareció de Fort Hood, en donde estaba acuartelada, el 22 de abril y elementos del Ejército confirmaron el 6 de julio que habían encontrado sus restos. Los investigadores dijeron que fue golpeada hasta morir en la base por un compañero, quien después se quitó la vida, según una denuncia federal.
La familia de Guillén ha dicho que fue acosada sexualmente por el soldado sospechoso de matarla, pero el Ejército ha dicho que no hay evidencia de ello.
Las damas de la Iglesia Reina de la Paz caminan al escenario para rezar el rosario durante el servicio conmemorativo.