>Con apoyo de Michou y Mau< Ayudarán a los niños quemados de Reynosa

Crean fundación para apoyar a menores que sufren quemaduras

A él no le importaban sus cicatrices. De hecho pudo haberse hecho muchas operaciones más, sin embargo, dijo, hasta aquí. Él lo que quería era sembrar para cosechar”. , Sonia Faz de Garza Cantú, integrante del patronato. Con la creación de una fundación que lleva su nombre, se celebró el aniversario número 79 de don Rigoberto Garza Cantú.Sonia Faz de Garza Cantú, su viuda, agradeció a amigos y familiares el acompañarla para iniciar este proyecto: “Tocando pieles, con un mensaje” que busca ayudar a niños que por diversas circunstancias sufren de quemaduras.En este evento estuvieron presentes Virginia Sendel de Lemaitre, presidenta de la Fundación Michou y Mau; Ana María Torre Cantú, presidenta de la delegación Tamaulipas de Michou y Mau; así como las artistas María del Sol, Arianna, Margarita y Arlette Pacheco.“Gracias a ustedes por permitirnos a mis hijos y a mi, que Rigo tenga su fiesta con su presencia porque a él, así le gustaba festejarse, con esa cascada de amigos que él supo hacer en este caminar de la vida cuando Dios Nuestro Señor por segunda ocasión, le permitió estar aquí con nosotros”.El reto de don Rigoberto, dijo, era volver a trabajar luego de haber sufrido un accidente.“A él no le importaban sus cicatrices. De hecho pudo haberse hecho muchas operaciones más, sin embargo, dijo, hasta aquí. Él lo que quería era sembrar para cosechar”.Destacó que el pasatiempo favorito de su esposo era trabajar.“Y cuando Dios le puso la oportunidad de poder servir a su pueblo, a su gente que tanto necesita y que tanto amaba, estuvo presente en cada una de las necesidades que día a día se le presentaban”.Para él no era fácil, explicó, después del accidente que sufrió a los 24 años cuando apenas empezaba a vivir.“Con el apoyo de sus padres, sus hermanos y su coraje por salir adelante luchó y lo logró. Yo lo conocí cuando él tenía siete años de accidentado. Yo sentí algo en mi alma que me dijo, va a ser el padre de mis hijos y le agradezco desde aquí que me haya hecho madre de cinco hijos”.El día de su cumpleaños, expresó, no pudo ser mejor fecha para inaugurar esta obra que él en algún momento de su vida quiso hacer para los niños que han sufrido de quemaduras.“Cuando él veía a un niño se preguntaba de qué manera podía ayudarlo porque sabía que estaba sufriendo lo que él sufrió. Como una manera de honrar su memoria hemos planeado mis hijos y yo, con el apoyo de Virginia y de Ana María, hacer que esta fundación ayude como él en vida lo hizo”.