El comunicado chino aseguró que el de la OTAN era una “difamación sobre el desarrollo pacífico de China, un juicio erróneo de la situación internacional y del propio papel (de la OTAN), y una continuación de la mentalidad de la Guerra Fría y de la psicología política organizativa".
Los aliados de la OTAN unieron a Estados Unidos el lunes para criticar formalmente a Beijing calificándola de “desafío de seguridad constante".
Washington ha señalado a China como una amenaza, especialmente en el Mar de la China Meridional, donde ha construido y militarizado islas artificiales, así como por sus intentos de intimidar a Taiwán, un territorio autónomo que Beijing reclama como propio y sostiene que debe anexionarse por la fuerza si fuese necesario.
La misión china dijo que el gasto de Beijing en sus fuerzas armadas es considerablemente menor al de los miembros de la OTAN, y acusó a la alianza de conjurar una amenaza militar de China para justificar su propia agenda.
China “nunca renunciará al derecho a mantener la paz pero defenderá de forma inquebrantable nuestra soberanía, seguridad y desarrollo", agregó.