En abierto proselitismo político, un sector de la jerarquía católica, encabezado por el polémico cardenal Juan Sandoval Íñiguez, arzobispo emérito de Guadalajara, cerró la pasada jornada electoral con llamados a votar en contra de Morena y criticando duramente al gobierno de la Cuarta Transformación, al que calificó como un régimen “comunista” similar al de Cuba y Venezuela.
Pese a las advertencias de la Secretaría de Gobernación, que pidió a la Iglesia respetar el Estado laico y no inmiscuirse en el proceso electoral, el cardenal Sandoval y otros jerarcas católicos lanzaron sus llamados proselitistas pocos días antes de la elección, a través de videos difundidos en redes sociales.
Justo el 6 de junio, día de las elecciones, el Instituto Nacional Electoral (INE) intervino en el asunto y pidió a Facebook que bajara el video de Sandoval Íñiguez, a quien aplicó “medidas cautelares”, y aún está por verse qué sanciones impondrá la Secretaría de Gobernación, instancia encargada de castigar a los ministros infractores.
Para el especialista en asuntos religiosos electorales Elio Masferrer Kan, este es un hecho inédito, pues es la primera vez que a un jerarca mexicano con rango de cardenal, el más alto en la jerarquía católica, se le sanciona por realizar proselitismo político.