Apoyada por una masiva organización y bajo la sombra del escándalo por sus correos electrónicos en su paso como Secretaria de Estado, Hillary Clinton tendrá hoy en Las Vegas su momento estelar como favorita durante el primer debate de los aspirantes del Partido Demócrata a la Casa Blanca.
Busca Clinton afianzar ventaja en debate
Apoyada por una masiva organización y bajo la sombra del escándalo por sus correos electrónicos en su paso como Secretaria de Estado, Hillary Clinton tendrá hoy en Las Vegas su momento estelar como favorita durante el primer debate de los aspirantes del Partido Demócrata a la Casa Blanca.
Washington DCCon 16 puntos de ventaja en promedio en las encuestas a nivel nacional, Clinton está obligada a disipar con aplomo y afabilidad las dudas sobre su campaña en los estados de Iowa y New Hampshire.En éste último, su principal rival, el senador independiente Bernie Sanders, la supera en sondeos locales.Ustedes deben darse cuenta de que yo realmente no soy un ser humano. Fui construida en un garage de Palo Alto (California) hace mucho tiempo, bromeó Clinton en su última entrevista antes del debate con el sitio BuzzFeed, cuando le preguntaron por qué no sudaba, en un intento de humor.Con uno de los más altos porcentajes de cualquier político tras haber fungido como Primera Dama, senadora y Secretaria de Estado, Clinton ha buscado remediar la caída en las encuestas al proyectar una imagen más humana, incluidos esfuerzos como la presentación en el programa Saturday Night Live este mes.Para los expertos en mercadeo político como Bruce Newman, de la Universidad de DePaul en Chicago, Clinton tiene ante sí la oportunidad para lograr un desempeño sólido que provoque un nocaut a sus rivales, al referirse con seriedad a temas de política interna y exterior pero sin olvidar conectar con el público.Es el tiempo de nocaut para Hillary. Un desempeño fuerte solidificaría su posición como única contendiente factible de los demócratas. Debe ser dura, cálida y vaga al mismo tiempo, lo que no es una tarea fácil para ella, pero en línea con su más reciente cambio de imagen, dijo Newman ayer.Éste es el segundo intento para Clinton de alcanzar la nominación luego de que el Presidente Barack Obama se la arrebatara en 2008.Sin embargo, ahora la mayoría de las figuras del Partido Demócrata la apoya como favorita.Ésta será realmente la primera vez que los votantes a nivel nacional verán que hay mucho más de una alternativa a la inevitable líder en las encuestas de este año, la Secretaria Clinton, dijo Martin OMalley, el ex Gobernador de Maryland, quien participará también en el encuentro.Además del escándalo por el uso de una cuenta de correo electrónica privada en sus años al frente del Departamento de Estado, Clinton deberá enfrentar cuestionamientos de sus contrincantes sobre temas como su compromiso con el libre comercio o la intervención en Libia.La ex Senadora también enfrenta el fantasma de la posibilidad de que el vice Presidente Joe Biden decida ingresar a la competencia, por lo que según Mitchell McKinney, profesor de comunicación de la Universidad de Missouri en Columbia, Clinton deberá modificar su estilo previo de no involucrarse en pugnas.Con el impulso que tiene momento Bernie Sanders, considerado el retador, y con Joe Biden considerando seriamente entrar a la competencia, Clinton ahora debe dar una enérgica presentación en el debate que podría requerirle alterar su típico estilo, dijo McKinney.El domingo, el Presidente Barack Obama aceptó que Clinton cometió un error al usar su cuenta de correo privado en su cargo como Secretaria de Estado, pero evitó ahondar en críticas contra su ex colaboradora, quien representa la posibilidad más seria de que una mujer llegue al frente de la Casa Blanca.Además de Sanders y OMalley, los otros dos aspirantes que también participarán en el debate, pero que no han realizado mayores actividades de campaña, son el ex senador por Virginia Jim Webb, y el ex Gobernador de Rhode Island Lincoln Chaffee.