Azota tormenta de nieve y lluvia a EU

Retrasa al menos 4 mil vuelos y obliga a cancelar más de 2 mil

Washington, D.C. Más de 4 mil vuelos sufrieron retrasos y cerca de 3 mil fueron cancelados en medio de la tormenta de nieve y lluvia que este miércoles azota gran parte de la costa este de Estados Unidos, y que ha dejado sentir sus efectos en Washington, Nueva York y Nueva Jersey. Según la página flightaware.com, que rastrea los vuelos, hasta después del mediodía (hora local) se contabilizaron 4 mil 33 retrasos y 2 mil 138 cancelaciones en todo el país. En el aeropuerto Washington-Dulles, donde en promedio se experimentaron demoras en los despegues de poco más de una hora, se registraron 79 aplazamientos y 237 cancelaciones, mientras que en el Ronald Reagan, en las afueras de la capital, hubo 152 vuelos demorados y 360 cancelados. También el aeropuerto de Baltimore-Washington, en el estado de Maryland, se contabilizaron 228 cancelaciones y 91 retrasos. La web detalló que el aeropuerto de Newark, en estado de Nueva Jersey y que sirve a Nueva York, sufrió demoras de alrededor de tres horas y 55 minutos en las llegadas y de unos 30 minutos en las salidas. También las terminales aéreas John F. Kennedy y LaGuardia sufrieron retrasos en los aterrizajes de unas dos horas y 20 minutos. Medios locales indicaron que alrededor de 117 millones de personas están bajo algún tipo de alerta por las condiciones del clima. El Servicio Nacional de Meteorología de Estados Unidos (NWS, en inglés) señaló este miércoles en Twitter que las fuertes lluvias y el clima invernal afectarán gran parte del este del país hasta este jueves y señaló que se esperan más nevadas en el oeste. A lo largo de la costa este y sus proximidades, se esperan varios centímetros de nieve que comenzaron a caer el martes por la noche y se mantendrán durante el miércoles. Según el NWS, es previsible que la tormenta que barre la zona este salga el viernes, pero es probable que una nueva traiga fuertes lluvias adicionales desde el sureste. Entre finales de enero e inicios de este mes, una ola de frío extremo azotó Estados Unidos con temperaturas que alcanzaron los 39 grados bajo cero y una sensación térmica de -45 en zonas del medio oeste del país y causaron al menos 21 muertos.