La petición viene de hace algunos años, con el argumento de la incosteabilidad del servicio debido a los altos costos del combustible y refacciones.
“El transporte está derrotado en todo el sentido de la palabra, ahorita la situación si estaba crítica ahorita está peor con el período de vacaciones que tenemos encima”, comentó el secretario general del Sindicato de Micros y Taxis Verdes, Ramón Hernández Manríquez.
“Son varios factores que nos tienen hasta cierto punto apachurrados por la cuestión de ingresos, independientemente de ello tenemos una solicitud de ingreso a la tarifa, es de un peso, está vigente”.
El representante de los concesionarios y trabajadores del volante en la localidad dijo que la reparación de una unidad tipo microbús tiene un costo en promedio de 40 mil pesos, por lo cual, algunos concesionarios al no poderlos cubrir han tenido que echar mano de unidades que ya se encontraban fuera de servicio, pero todavía funcionales en lugar de los vehículos autorizados por la Subsecretaría del Transporte.
“Esto Transporte lo sabe y sabe que no hay de otra, que hay la necesidad de que se cubran los diferentes sectores de la ciudad, y que no hay capacidad económica para echar a andar las unidades que tenemos”. El profesor Hernández Manríquez señaló que otra causa por la cual se podrían ir a paro alrededor de 750 unidades es en el caso que el Gobierno del Estado intente sacar de circulación a estas unidades.
“Si una máquina Diesel con 40 mil pesos los echas a andar, ¿de dónde sacas los 40 mil pesos?”, cuestionó. “Independientemente del costo de las llantas, el carburante, las refacciones y demás, todo mundo incrementa su producto y nosotros estamos con la misma tarifa de hace más de tres años”.
Las rutas que ya emplean unidades ‘yonqueadas’ en su totalidad son la 24, Cumbres-Central y la 1, Infonavit Miguel Alemán-Hospital General.