CIUDAD DE MÉXICO.
El Consejo Mexicano de la industria de Productos de Consumo (ConMéxico) cuestionó el proceso y revisión de la totalidad de comentarios emitidos por diversos interesados para modificar la Norma sobre etiquetado de advertencia en alimentos y bebidas preenvasados. Lorena Cerdán, directora general del Consejo, dijo que pese a que se trata de la consulta pública con la mayor participación en la historia, las diferentes opiniones de la industria, academia y expertos no se vieron reflejadas en la norma definitiva que se aprobó.
"Se revisaron, o supuestamente se revisaron, más de 6 mil comentarios en tres semanas. "Más allá de los que estaban a favor y en contra, lo importante era que se analizaran aquellos comentarios que aportaban evidencia técnica, elementos jurídicos, ése es el ejercicio que creemos no se dio con rigor, desde diferentes perspectivas", sostuvo. Los temas centrales de la Norma, los que tienen que ver con sustento técnico, jurídico y evidencia científica no fueron debidamente atendidos, insistió. "La Federación Mexicana de Diabetes pedía y solicitaba que la información incluyera los contenidos de azúcar por porciones, que no se restringiera el uso de edulcorantes no calóricos dado que son una de las alternativas más seguras para los pacientes. "Hubo muchas cosas que no hubo oportunidad de decir 'desde la perspectiva de derecho comparado tendríamos que considerar esto', o 'esta asociación, academia opinó esto que no se tomo en cuenta y que debería incluir o balancear", ejemplificó.
Lorena Cerdán dijo que Chile no es el caso de éxito que los representantes de las autoridades mexicanas han mencionado, y con la nueva Norma que se aprobó los únicos que van a salir afectados son los consumidores por no tener información precisa y veraz de los alimentos procesados. Posterior a la aprobación de la Norma definitiva, la SE defendió que los Comités y los grupos de trabajo estuvieron integrados por el sector industrial, organismos internacionales, colegios de profesionales, sociedad civil y centros de investigación, además de otras dependencias como la Secretaría de Salud, Cofepris y Sader. Los integrantes de los comités y grupos de trabajo sostuvieron más de 20 reuniones con técnicos y expertos en la materia y esto dio soporte científico a la NOM 051, dijo.