Tokio, Japón
Guerrero fue la primera de las 11 competidoras que participó en el estadio Olímpico de Tokio por lo que después de su participación en lanzamiento de disco, categoría F55, sólo restaba esperar.
Y sucedió. La china Feixia Dong, consiguió 26.64 metros para conquistar el oro y la letona Diana Dadzite con 25.02 metros se colocaba en segundo lugar. En tercer lugar aparecía Rosa María, inalcanzable por el resto de las participantes. Sin duda, un regalo de Diós.
“Me siento agradecida con Dios, mi familia y con todo mi respeto a mi entrenador Iván Rodríguez Luna, al que admiro porque esta medalla también es parte de él”, señaló Guerrero en entrevista con la CONADE.
Se consiguió el objetivo. Nada ni nadie logró arrebatarle la gloria olímpica a Rosa María Guerrero.
“Se sintió la humedad, la insolación y todo eso, entré primero, pero igual iba con mi objetivo, no se cumplió la marca que quería, pero se consigue la medalla de bronce y estoy muy contenta y feliz”, sentenció.