Accidente de avión militar en Mississippi deja 16 muertos

Itta Bena, Mississippi Un avión de la Infantería de Marina se estrelló e incendió en un campo de soja en Mississippi, matando a los 16 militares que estaban a bordo y dejando un tendal de humo y escombros por toda la zona rural. Es la caída más mortífera de una aeronave de la Infantería de Marina, ya sea a nivel nacional o internacional, desde el 2005. Quince marines y un cadete de la armada estaban a bordo cuando el avión de reabastecimiento KC-130 cayó en picada y se estrelló el lunes a la tarde a unos 135 kilómetros (85 millas) al norte de Jackson, la capital estatal, dijeron las autoridades. Un testigo dijo que se hallaron restos humanos a más de una milla de distancia. La Infantería de Marina no dio de inmediato una hipótesis sobre la causa del estrellamiento. El FBI se sumó a la investigación, pero el mayor de la Infantería de Marina Andrew Aranda dijo a reporteros que no fue un acto criminal. El KC-130 es un tipo de avión que se usa para reabastecer de combustible a los aviones en pleno vuelo. El avión iba desde la base de la Infantería de Marina en Cherry Point, Carolina del Norte hasta la base naval en El Centro, California, cuando se estrelló. Algunos de los marines eran de una unidad de reserva basada en Newburgh, estado de Nueva York, dijeron los militares. Andy Jones dijo que estaba trabajando en la piscifactoría de bagres de su familia poco antes de las 4 de la tarde cuando escuchó una explosión, miró al cielo y vio al avión cayendo en espiral con un motor humeante. “Miré hacia arriba y vi al avión que hacía espirales”, señaló. Según Jones, el avión cayó detrás de algunos árboles en un campo de soja, y para cuando él y otros llegaron a la zona del siniestro, había intensos incendios que les impidieron acercarse. La fuerza del impacto casi aplastó la aeronave, agregó. Jones dijo que un hombre le pidió prestado su teléfono celular para llamar a las autoridades y reportar que había muertos desparramados por una carretera a más de 1 milla (1,60 kilómetros) de distancia del lugar. El jefe de bomberos de Greenwood, Marcus Banks, dijo al Greenwood Commonwealth que los restos del aparato quedaron esparcidos en un radio de unos ocho kilómetros (cinco millas). Los bomberos intentaron extinguir las llamas del incendio principal, pero se replegaron tras una explosión, manifestó Jones. Columnas de un denso humo negro podían verse desde varios kilómetros de distancia, y los fuegos seguían activos más de cuatro horas después del siniestro.  APOYO. Personal de todas las corporaciones implicadas en aeronáutica se concentró cerca del sitio donde se estrelló el avión, observándose al fondo una columna de humo.